Segunda B | Toledo
Iriondo consigue que el Toledo vuelva a ganar
Deja el descenso a una distancia de tres puntos.
No lo tenía nada fácil en su debut Antonio Iriondo, que tomó el relevo de Luis Díaz el pasado viernes y prácticamente sin tiempo se hacía cargo del equipo en el Cerro del Espino ante el Atlético B.
Posiblemente con una mínima incidencia, pero también con algo de su parte, el Toledo se llevó la victoria ante el equipo colchonero y el nuevo técnico logró el efecto deseado: que el equipo del Salto del Caballo volviera a ganar, ya que estaba muy necesitado de puntos. Con los tres logrados el pasado domingo se distancia a tres puntos del descenso y aunque no ha logrado todavía nada, ha puesto la primera piedra para alcanzar su objetivo en las doce jornadas que aún restan de campeonato.
El gol de Pulga, en un lanzamiento de falta directa acompañado de algo de fortuna, la buena actuación de Bermúdez bajo palos y el buen trabajo de todo el conjunto sirvieron para que el equipo verde recuperara su identidad y demostrara que tiene argumentos para mantenerse.
Viejo conocido.
Después de las tres derrotas consecutivas frente al Alcorcón, Guadalajara y Real Oviedo, el equipo se había puesto en una situación muy delicada y necesitaba reaccionar de inmediato. La elección de Antonio Iriondo era posiblemente la mejor que podía hacer el Toledo en estos momentos, toda vez que el técnico vasco ya conocía la casa, pues no en vano había entrenado al equipo en una etapa anterior, cuando el equipo militaba en Tercera División. Por aquel entonces, el Toledo disputó dos playoff de ascenso.
Iriondo conoce la casa, también la categoría y puede ofrecer ese plus de motivación que los jugadores estaban necesitando. Con todo, la trayectoria del Toledo esta temporada ha destacado por la irregularidad. Sus trece derrotas lo refrendan. Además, hasta el partido ante el Atlético B, el equipo se había mostrado muy débil en sus desplazamientos, donde sólo había logrado dos victorias y dos empates. El Toledo, es además, el cuarto equipo menos goleador de la categoría, una circunstancia que le está pasando factura.