Salva Ballesta evita el triunfo del Castellón in extremis

El Albacete sigue sin conocer el triunfo en 2010 y acumuló ya siete jornadas sin vencer, tras igualar a un tanto frente a un Castellón que suma, por contra, seis jornadas sin perder y que no venció en el Carlos Belmonte porque Salva Ballesta lo evitó en el último momento. No se jugaban los Juegos Olímpicos de Invierno pero lo cierto es que el panorama era muy similar al de Vancouver. El Carlos Belmonte aguantó la tromba de nieve que cayó durante todo el día sobre la capital albaceteña y que obligó a los empleados locales a quitar la misma y pintar las rayas del campo de color rojo.

La primera jugada de peligro la protagonizó el equipo visitante a los once minutos. Diego Reyes, de falta, estuvo a punto de marcar pero la estirada de Cabrero lo evitó. Cinco minutos más tarde Sales probó las manoplas de Lledó, que tuvo que emplearlas para despejar a córner. El partido se tranquilizó hasta que pasada la media hora de juego, Hidalgo, el mejor de los locales, se llevó el balón hasta la frontal para ''bombardear'' a un Lledó que repelió con los puños.

El comienzo de la segunda parte terminó por congelar a los poco más de dos mil valientes que se acercaron hasta el Carlos Belmonte pues ninguno de los dos equipos ofreció continuidad a un juego más propio de tenis de mesa, con intercambios constantes de desaciertos y balones perdidos. En el minuto sesenta y ocho, Ulloa despertó del sopor general a los aficionados con un tanto que fue anulado por un claro fuera de juego.

El Castellón pasó a dominar el juego y poco antes de la mejor oportunidad de los albinegros, Verza lanzó flojo en el minuto setenta y seis. En la jugada siguiente, David Silva lanzó un disparo duro que Cabrero despejó y Ulloa apareció en el área pequeña para desperdiciar el que hubiera supuesto el 0-1. Tanto fue el cántaro a la fuente que, a tres minutos del final, Nico Medina, se aprovechó de un nuevo error a la hora de despejar de la zaga albaceteña y marcó un gol que dejó muy tocado al equipo de Julián Rubio.

Un minuto más tarde Salva Ballesta, ejerció una vez más de salvador, aprovechando una ''cantada'' monumental del portero castellonense, Lledó, para empatar un encuentro pleno de desaciertos. En el descuento, una nueva jugada de Nico Medina, que rompió la cintura de Tarantino, estuvo a punto de costarle el segundo gol al conjunto local.