Oficio contra necesidad

Ambos partieron con objetivos similares, pero ahora miran hacia lados bien diferentes. Osasuna y Tenerife están hechos para luchar por la permanencia, aunque la actualidad diga lo contrario. Los navarros, gracias a su experiencia en la categoría, vigilan de reojo los puestos europeos, a los que tienen a tiro de piedra, mientras que los tinerfeños, noveles de fútbol bonito, pero poco efectivo, tratan de salir del descenso a donde han caído hace algunas semanas. Será un duelo de intensidad el que se vea esta tarde en el Reyno de Navarra.

Los de José Luis Oltra han viajado a Pamplona con ganas de sacarse el mal sabor que dejó la inesperada derrota ante el Zaragoza la semana pasada en casa. No entraba en los planes de nadie y menos después de haberse adelantado en el marcador, pero la Liga, como la vida, sigue y hay que mirar hacia delante. Fue una semana de reflexión y de análisis. A poco que el equipo empiece a mejorar errores puntuales y la pelota empiece a entrar, la situación cambiará.

No será fácil para los tinerfeños el choque de hoy. Primero porque históricamente es una plaza complicada y segundo porque los pamplonicas están en una muy buena dinámica. Será importante para el Tenerife aguantar la embestida inicial del Osasuna, que contará con las gradas siempre entregadas a la causa. Puede valerle de ejemplo el encuentro ante el Espanyol donde a los 20 minutos, estaba todo liquidado.

Para el partido de hoy, se presume que el técnico visitante no haga muchos cambios. En principio repetirá el mismo equipo que perdió la semana pasada. Es que salvo esos fatídicos seis minutos, el rendimiento fue bueno. Regresa a la lista Omar Ramos quien le puede dar algo de chispa al equipo en caso de ser necesario.

Por su parte, José Antonio Camacho podrá contar con casi toda su artillería menos con Juanfran que ha sufrido una apendicitis que le dejará fuera varias semanas. El entrenador ya se ha encargado de que su vestuario no se relaje y piense que el choque está ganado sólo con ver la clasificación. Pandiani, villano en el Heliodoro, será el principal peligro para la zaga blanquiazul.