"En 1996, el día del 1-2, le pegué duro a Laudrup"

Usted fue titular esa noche de la Liga 1995-96 en la que el Espanyol ganó 1-2 en el Bernabéu. Desde entonces, ni un triunfo más...

Sí. Recuerdo esos dos buenos goles de Jordi Lardín. Tuvimos la suerte de marcar pronto el 1-2 tras el empate del Madrid. Hace poco vi el partido por televisión. Mi hijo pequeño vio que me enseñaron una amarilla al cuarto de hora por una entrada dura a Laudrup. Me dijo que por qué pegaba tantas patadas.

¿Y ahora?

Tenemos que quitarles el balón y salir rápidamente hacia su portería. Deberíamos acabar las jugadas en el área rival. Hay que saber qué hacer con el balón y tener pegada. Si el Madrid recupera rápido, mal asunto...

Parece fácil.

La teoría es muy bonita pero luego hay que llevarla a la práctica. Si al Madrid le das al balón, lo pagas caro. Habrá que rozar la perfección para sacar algo positivo.

¿Cómo espera que le definan su juego al final del partido?

Veremos cómo transcurre, aunque espero que recuerden al Espanyol como un equipo que fue valiente y consecuente con su fútbol.

En el Madrid no estará Cristiano...

Nuestra propuesta futbolística no está condicionada a la presencia de Cristiano Ronaldo.

Tiene un equipo muy joven. ¿Cree que puede ser demasiado tierno?

Hay que olvidarse de la sensación de miedo escénico. Los jóvenes deben divertirse y disfrutar en un escenario así, y controlar las acciones. No entrar a lo loco.