Copa del Rey | Semifinal | Ida | Atlético 4 - Racing 0
El Atlético se tiende la alfombra roja hacia la final
El conjunto rojiblanco arrolló y goleó al Racing de Santander en el partido de ida de la semifinal y pone rumbo hacia la final del próximo mes de mayo. Simao y Reyes marcaron los dos primeros goles en la primera mitad. Tras el intermedio, Forlán completó la goleada al transformar dos penaltis, uno que no fue y otro que fue clarísimo.
Salvo hecatombe colchonera en el partido de vuelta en Santander, el Atlético de Madrid volverá a disputar una final de Copa del Rey diez años después. Los hombres de Quique, que mostraron una mejoría evidente en su juego, arrollaron y golearon al Racing. Simao y Reyes marcaron los dos primeros goles de los locales antes del descanso. Dos penaltis en la segunda mitad, uno que no fue y otro clarísimo sirvieron a Forlán para completar la goleada y colocar a su equipo con pie y medio en la final del próximo mes de mayo.
El Atlético se jugaba la temporada y Quique su puesto en los tres enfrentamientos consecutivos ante el Racing en una semana. Los malos resultados en Liga han hecho decantarse al técnico rojiblanco por la Copa como modo de salvar la temporada y entrar en Europa. La importancia del partido se adivinaba sólo con mirar el once inicial colchonero, en el que no faltaba ninguna de sus estrellas. Así, la formación del conjunto madrileño fue De Gea; Ujfalusi, Perea, Domínguez, Antonio López; Assunçao, Tiago, Reyes, Simao; Forlán y Agüero. Ante ellos, un Racing enchufado con seis victorias y tres empates en los nueve partidos disputados en 2010. Los de Portugal han visto como se alejaba la crisis liguera y llegaban volcados para buscar su primera final de Copa de la historia. Salvio, Pablo, Pernía, Borja, Toño, Arana, Edu Bedia y Morris se perdieron la cita.
Consciente de que se jugaba gran parte de la temporada, el Atlético saltó al césped mostrándose fuerte en el centro del campo y en los marcajes a los jugadores de un Racing bien armado atrás y en el que los mediocentros se veían obligados a ayudar a sus centrales para contener el buen comienzo local. El dominio de los hombres de Quique empezó a transformarse en ocasiones en pocos minutos y fue Agüero el primero en probar suerte desde la frontal con un disparo que desvió a córner la zaga cántabra con Coltorti ya batido. Acto seguido, fue el turno de Tiago, que mandó su remate al poste cuando ya se cantaba el gol en el Vicente Calderón. El buen juego y las ocasiones locales hacía que el gol pareciese cuestión de minutos, y así fue. En el minuto diez de partido, en un alarde de talento natural en el golpeo, Agüero sirvió con maestría un balón a Simao que aprovechó el portugués para clavar el primero con un zapatazo imparable en la portería de un atónito Coltorti.
La mejorada imagen que mostraba el Atlético pudo significar al borde del cuarto de hora el segundo tanto colchonero, pero Agüero remató de forma inocente ante Coltorti. Por aquel entonces, no había noticias del Racing. El equipo de Portugal estaba desaparecido y sus centrocampistas y delanteros no rascaban bola. Hubo que esperar demasiados minutos para que el conjunto cántabro se decidiera a probar a De Gea con un disparo de Serrano que atajó con acierto el canterano rojiblanco. Un cabezazo de Xisco que se perdió por encima del larguero de la portería local completaban el pobre bagaje ofensivo del Racing en la primera mitad. Una ocasión de Forlán que despejó in extremis Coltorti fue la antesala del segundo tanto atlético. Un centro de Simao desde la banda izquierda dio origen a una serie de rechaces dentro del área que se encargó de resolver Reyes con la zurda aumentando la ventaja de su equipo.
El comienzo del segundo acto coincidió con la primera sustitución del partido en el Atlético. Quique se vio obligado a retirar a Reyes, aquejado de molestias en la rodilla izquierda, para dar entrada a Jurado. El dominio incontestable de los locales en la primera parte no lo era tanto en el inicio de la segunda. Aunque no existía un dominador claro del partido, las oportunidades seguían cayendo del lado rojiblanco. Un disparo sin puntería de Tiago desde fuera del área y un saque de falta de Simao que se estrelló en el palo derecho de Coltorti pudieron sentenciar el partido y la eliminatoria en los primeros quince minutos que siguieron a la reanudación.
Los dos intentos locales para lograr el tercero provocaron que el Racing replegara sus líneas ante las acometidas locales. Fue entonces cuando Mateu Lahoz se inventó un penalti por una falta que cometió Toni Moral sobre Jurado fuera del área visitante. La injusta pena máxima fue transformada en gol por Forlán poniendo la eliminatoria muy cuesta arriba para los de Santander. Con tres tantos de diferencia en el electrónico todo parecía estar resuelto, pero para eliminar cualquier duda Torrejón cometió un claro penalti sobre Agüero que también se encargó de convertir en gol el uruguayo Forlán. La fiesta se instaló en el Vicente Calderón y Quique comenzó a retirar efectivos ante el claro resultado favorable para los intereses de los suyos.
Salvo catástrofe madrileña en el partido de vuelta de la próxima semana en Santander, el Atlético volverá a disputar una final de Copa diez años después. Su rival se decidirá en Getafe dentro de seis días en el partido de vuelta de la otra semifinal que disputan Sevilla y Getafe. Las opciones del Racing de lograr la machada son mínimas, por no decir nulas.