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Liga Adelante | Huesca 1 - Celta 1

Melero López deja huella en el empate del Alcoraz

Anuló dos goles locales y el 0-1 vino de una falta dudosa.

Javier Monsón
<b>IGUALADO. </b>Huesca y Celta de Vigo ofrecieron un encuentro intenso en El Alcoraz.
IGUALADO. Huesca y Celta de Vigo ofrecieron un encuentro intenso en El Alcoraz.PABLO OTÍN

Unas veces no se gana por no estar acertado, otras porque el equipo contrario te supera, y en esta ocasión el Huesca no ganó porque Melero López, sencillamente, no quiso. Predispuesto y chulesco desde el principio, el andaluz se erigió en protagonista y destrozó al Huesca en la jugada del gol celtiña (falta inexistente) y dos goles anulados a Juanma, que dejaremos en decisiones muy dudosas, y eso siendo demasiado benévolos.

Aire fresco en los de Eusebio, que sólo mantuvo a Vasco en el once respecto al jueves. El Celta no jugó mal de inicio, con el estilo de toque al que nos tiene acostumbrados, pero con desajustes defensivos que hicieron que Falcón no tuviese la tarde tranquila que deseaba. Las faltas en contra (todas, lo fuesen o no) descentraron a los azulgranas, que no encontraron en Lluis Sastre al desatascador habitual. Gallardo, que debutaba como titular, ofreció las mejores pinceladas de la primera mitad. Juanma, el mejor, comenzó su tarde aciaga en el 16, cuando se le anuló un gol por soplar a Falcón.

Así estaba el encuentro cuando Melero señaló una falta bastante dudosa a favor del Celta en la zona de tres cuartos. El lanzamiento se estrelló en el palo y Corona lo guió sin quererlo hasta el gol. El Huesca no rebló tras el mazazo, siguió intentándolo hasta que el 'pichichi' Camacho logró la igualada en un grave fallo defensivo de los visitantes.

Otro gol anulado.

La segunda mitad siguió por el camino de la igualdad en el juego, con un Celta que intentaba llegar y un Huesca que llevó más peligro. Juanma la volvió a dejar en la jaula, pero el asistente ya se encontraba imitando a la estatua de Colón desde hacía rato. Dio igual que el canario no estuviese en fuera de juego: ante la duda, a levantar. Y Melero, más preocupado de hacer caso a su cuarto árbitro, echó del banquillo a Antonio Calderón y a Paredes, más quemados que la pipa de un indio, como se dice vulgarmente. Ahí murió un partido, y una primera vuelta, que deja a ambos con 24 puntos en el atasco de M-40 que hay en la zona media-baja. El Celta sueña con la Copa, y el Huesca se centra en el partido ante el Elche.