Liga BBVA | Getafe - Atlético
Soldado examina a Asenjo
Míchel sale al ataque y Quique duda si usar un trivote
Asenjo se ha visto atrapado en un problema inmerecido. Llegó al Calderón como fichaje estrella y ahora, sin que su rendimiento haya sido malo, la afición pide que el titular sea De Gea. El Atleti ya sabía que tenía en la cantera a uno de los dos porteros más prometedores de España y, aún así, fichó al otro. De aquellos barros llegaron estos lodos y ahora uno de los dos está abocado a irse a final de curso. Mientras tanto, cada partido es un examen para Asenjo, el de hoy muy duro ante el ofensivo Getafe de Míchel.
Los azulones harán su mejor primera vuelta de la historia si ganan hoy, demostrando que cada vez que piensas que su proyecto ha tocado techo, sube un escalón más. Muy centrado en la Copa, ha perdido sus dos últimos partidos, pero su artillería es apabullante: la pegada de Casquero, el talento puro de Parejo, la fabulosa diestra de Pedro León, la velocidad de Manu y el gol de Soldado. Casi nada.
Cambio de estilo. Enfrente, Quique ha llegado a una encrucijada en la que ya se vieron Aguirre y Abel. Si pone a los mejores, el Atleti juega con cuatro atacantes y cualquier equipo puede marearle en mediocampo como hizo el Celta. Si refuerza el centro, ha de sacrificar a una de sus estrellas. Gana control, pierde llegada. Esa es la duda, aunque el precario estado físico de Simao y Forlán puede facilitarle la apuesta por el trivote. Assunçao y Tiago son fijos, con Raúl García a la espera.
Donde no hay discusión es con Kun y Reyes, líder y escudero de la reacción atlética. Junto al Valencia, es el único que ha ganado los tres partidos de Liga de 2010, pero llega desde tan atrás que sigue sin margen de error. Nunca ha perdido en el Coliseum, pero el Geta es mejor cada año. Un derbi de verdad
Forlán está peor del tobillo, pero ha pedido jugar
Quique está muy pendiente del estado físico de Forlán. La semana pasada fue difícil para el uruguayo, que tuvo fiebre la noche antes del partido con el Sporting, pero luego jugó y marcó. Sin embargo, sufrió un esguince y tuvo que ser retirado en volandas por el recuperador físico debido a un fuerte mareo por la debilidad. El esguince parecía descartarle para la Copa, pero forzó y jugó la segunda parte, lo que agravó la lesión. Ahora tiene el tobillo inflamado, pero ha pedido a Quique jugar y éste le hará caso, agradeciendo su compromiso, salvo recaída de última hora.