Togo inicia tres días de luto nacional por los muertos del atentado

Togo inició hoy tres días de luto nacional por los fallecidos en el atentado cometido el viernes pasado en el enclave angoleño de Cabinda contra la selección togolesa de Fútbol, cuando acudía a disputar la Copa de África de Naciones.

Los cuerpos del entrenador asistente de la selección de Togo, Abalo Amelete, y el jefe de prensa, Stan Ocloo, llegaron a Lomé esta madrugada en el avión que traslado desde Cabinda a su país al resto del equipo togolés, retirado de la competición por su Gobierno, al considerar que no hay garantías de seguridad.

Los féretros con los restos de Amelete y Ocloo, cubiertos con la bandera nacional togolesa, fueron bajados del avión a hombros de miembros de la Gendarmería Nacional, en medio de una multitud que se encontraba en la pista del aeropuerto, en la que estaban familiares de los fallecidos.

El recibimiento a los féretros de los dos togoleses fallecidos y al resto de la expedición estuvo encabezado por el Primer Ministro de Togo, Gilbert Houngbo Fossoun, junto a los miembros de su Gobierno, y tuvo lugar en medio de una gran emoción, marcada por los gritos de dolor y el llanto de los familiares de las víctimas.

Posteriormente, los cuerpos de los dos fallecidos fueron trasladados al depósito de cadáveres de Lomé, a la espera de que las familias decidan cuando y como se celebrarán sus funerales y donde serán inhumados, lo que todavía no han anunciado.

"Este es el momento más difícil de mi vida. La vida es así y tiene tiempos difíciles", dijo a los periodistas en el aeropuerto, a la llegada a Lomé, Emmanuel Adebayor, capitán de la selección togolesa y jugador del equipo británico Manchester City. Sobre a la retirada de la selección togolesa de la Copa de África de Naciones que se disputa en Angola, pese a que los jugadores pretendían jugar la competición en homenaje a sus compañeros muertos, Adebayor dijo: "El gobierno dijo que volviéramos y hemos vuelto, que es lo importante".

Los jugadores también confirmaron a su llegada a Lomé que los muertos en el atentado fueron tres, Amelete, Ocloo y el conductor angoleño del autobús en el que habían viajado desde Congo a Cabinda, que fue el primero en fallecer. Los heridos de consideración fueron ocho, entre ellos el portero suplente, Kodjovi Kadja Obilale, que fue trasladado a Sudáfrica donde fue sometido a una operación quirúrgica y está hospitalizado "grave pero estable", según el parte médico del Hospital Milford de Johannesburgo.

El autobús que transportaba a los jugadores de la selección nacional de Togo, que iba escoltado por la Policía angoleña, fue ametrallado por componentes de la guerrilla separatista del Frente para la Liberación del Enclave de Cabinda (FLEC) poco después de entrar en territorio de Angola desde Congo.

Hoy mismo, los medios oficiales angoleños han difundido una declaración del procurador provincial de Cabinda, António Nito, en la que anunciaba "la captura de dos integrante del grupo del FLEC que atacó a la selección de Togo". Nito agregó que la Procuraduría, en colaboración con el Departamento Provincial de Investigación Criminal de Cabinda, ha abierto "un proceso para esclarecer los hechos y la responsabilidad de los implicados".

A consecuencia del atentado, el Gobierno togolés decidió retirar a su selección de la competición africana, al considerar que no existían las garantías de seguridad necesarias para seguir en el torneo, pese a que algunos jugadores anunciaron que querían jugar en homenaje a sus compañeros muertos y heridos.

La 27 edición de la Copa de África de Naciones se inició ayer en Angola y está previsto que finalice en ese país el próximo 31 de enero. Aunque oficialmente no existe guerra en la región petrolera de Cabinda desde 2006, se producen ataques esporádicos de la guerrilla, del FLEC, una de cuyas facciones había advertido de que aumentaría su actividad con motivo de la disputa de la Copa de África en Angola.