Del Pino saca petróleo ante un rival sin pegada

Con la ley del mínimo esfuerzo. Así ganó ayer el Numancia al Castellón en Castalia. Valió el tempranero gol de Javier del Pino, cuando apenas habían transcurrido dos minutos y medio, que dejó electrocutados a los levantinos. Luego los sorianos, que se acercan a las plazas de ascenso, supieron manejar bien los tiempos del partido ante un rival que, por méritos, mereció más después de completar un aceptable segundo tiempo, con claras ocasiones de gol para establecer la igualada. La victoria consolida a los 'rojillos' como clara alternativa para pelear por alcanzar la Primera División, a la vez que hunde un poco más a los albinegros en lo más profundo de la tabla clasificatoria.

Dos minutos y medio necesitó la escuadra soriana para dejar en evidencia a los albinegros. El balón le llegó a Javier del Pino, que vio dudas en el arquero local y le elevó el balón desde 30 metros. Lo bombeó y ya cayó dentro de la red. A las primeras de cambio se puso el partido cuesta arriba. Y la verdad, poco más dio de sí el primer tiempo. El Numancia tiró del oficio. Manejó los tiempos de partido. Tuvo más el balón y lo regaló menos. El Castellón fue un manojo de nervios. No se aclaró. Sólo buenas intenciones y eso, en el fútbol, no basta para ganar. Los tres puntos le venían como anillo al dedo a los muchachos de Gonzalo Arconada. A los 'orelluts' les hundía más que nunca en la miseria. Y con el 0-1 se llegó al intermedio. Con mucha más pena que gloria.

Asedio local.

Más animosos y con más intensidad arrancaron los de Tintín Márquez en el segundo tiempo. En los cinco minutos de la reanudación el Castellón ya había hecho más que en todo el primer tiempo. El central César Martín, de cabeza, dispuso de la ocasión más clara. Visto que el partido estaba atascado y más decantado para los albinegros, su técnico movió ficha. Retiró al canterano Aaron y sacó al cántabro Jonatan Valle. Por momentos, planeó por los cielos de Castalia el gol del empate. Al menos los anfitriones tocaron mejor y con el cambio el juego cobró alegría y más sentido. Páez tuvo la última, pero se la paró magistralmente Edu Navarro, que salvó el triunfo soriano.

G. Arconada "Sin el balón, nos tocó sufrir"

Muchas veces los primeros partidos después de las vacaciones es difícil ganar. Nosotros tuvimos la suerte del 0-1 a las primeras de cambio. Luego, sin el balón, nos tocó sufrir en la segunda parte. El campo no estaba para florituras. Tras el descanso ellos nos metieron atrás y tuvieron sus ocasiones. Lo importante es haber sumado los tres puntos. Por supuesto que hay cosas que mejorar y en ello estamos".

Márquez "Cada derrota es un paso atrás"

Regalamos los 45 primeros minutos. En la segunda parte el equipo estuvo bien. No me canso de decir que los rivales, sin hacer mucho más que nosotros, nos ganan. Cada ocasión del contrincante, gol en contra. Tras el descanso tuvimos ocasiones para empatar. El equipo salió con otro espíritu. Cada derrota es un paso atrás, pero debemos seguir compitiendo. No voy a permitir que ningún jugador baje los brazos".

306 minutos sin ver portería

Tras quedarse ayer a cero, el Castellón acumula 306 minutos sin marcar un gol. Atrás queda el tanto marcado por el chileno Nico Medina en el minuto 54 del partido ante el Nástic. Desde entonces, no le ha marcado ni a la Real Sociedad, Huesca, ni ayer al Numancia.