Un zurdo que enamoró en el Bernabéu

Pocos futbolistas han levantado tanta expectación en Cantabria desde su más tierna infancia como Sergio Canales. Sólo Jonatan Valle, hoy en el Castellón, quien no llegó a mostrar en el Racing lo que prometía tras deslumbrar en el Torneo de Brunete. Canales, 18 años todavía, es un centrocampista creativo, zurdo, con llegada, visión de juego y un extraordinario último pase. Puede jugar tanto de mediocentro como de mediapunta. Es muy bueno y, además, estéticamente su fútbol es muy vistoso, elegante y técnico. Ayuda, por otra parte, que es espigado, rubio y, dicen, hasta guapo.

También tiene aspectos francamente mejorables: fundamentalmente, en el trabajo defensivo y en el físico. No recupera muchos balones, tampoco va al choque y le cuesta mantener el ritmo durante más de 60 ó 65 minutos. Ya debutó el año pasado contra Osasuna. Tanto Muñiz como Mandiá le subieron a entrenarse con el primer equipo y confesaron beber los vientos por él pero luego, a la hora de la verdad, apenas lo utilizaron.

Con éxito. Portugal ha contado con él desde su debut como técnico racinguista. Le brindó su primera gran oportunidad en el Bernabéu. Logró un gol, pero el árbitro se lo anuló por fuera de juego inexistente. A partir de ese partido muchos clubes españoles y extranjeros pusieron sus ojos en el joven futbolista. Ante el Espanyol, dos semanas después, se consagró con dos goles y un partidazo. En total, ha disputado 11 encuentros en Primera, repartidos en 262 minutos. Canales es un producto 100% de la cantera racinguista, donde ha militado desde alevines. Lo más preocupante para los cántabros es que acaba contrato el 30 de junio. Es internacional con España Sub-17, Sub-18 y Sub-19.