La emoción impidió que Culebras pudiera dormir

Saltó con la misma ilusión que el primer día y eso que en sus espaldas hay más de 270 partidos entre Primera y Segunda División. Es que no esperaba ni ir convocado y mucho menos jugar, pero la lesión de un compañero la devolvió la posibilidad y rindió a un gran nivel. Después del partido, sus ojos brillaban de satisfacción. José Antonio Culebras volvió a ser feliz haciendo lo que más le gusta, jugar al fútbol.

Le felicitaron por todos los costados y no paró de agradecer "los gestos de cariño de la gente" desde el momento que saltó a calentar. "Estaba tan emocionado que a la noche no pude ni dormir", dijo el central a AS desde Soria, donde ha llegado para pasar las fiestas. "Uno siempre ha querido este trabajo y tengo una ilusión y unas ganas tremendas y cuando crees que la cosa está bastante oscura para participar, siempre tienes esa oportunidad y creo que la he aprovechado. Me voy muy contento a las vacaciones de Navidad".

La pena para el futbolista es que su satisfacción personal no sea completa porque el equipo no pasó del empate ante el Atlético de Madrid. "Me encontré muy bien en el campo y estoy muy bien en lo anímico, pero nos faltó la victoria", contó el de Puertollano.

Añadió diciendo que trató de romper ese tópico que dice que el jugador puede notar el tiempo si jugar. "Puede que tenga algo de razón", aclaró, pero la verdad es que la ilusión y las ganas tienen que poder con todas estas adversidades. Hace unos años me pasó una situación parecida y lo superé".

A pesar de su buena actuación, Culebras sabe que una de las demarcaciones a reforzar es la defensa y sus opciones de jugar más minutos se irían reduciendo. "Se habla de fichajes, de que puede venir un central, y quizás mi reivindicación ha llegado tarde, pero en las decisiones técnicas no entro", declaró. Culebras insistió en que los refuerzos es algo que él no puede controlar, "pero me quedo con el cariño de la gente y garantizo que cuando juegue lo daré todo".

Estreno en Primera en casa

Tan abrumado estaba Culebras que, tras el empate ante el Atlético de Madrid, pidió perdón a los medios si se cortaba porque ya había perdido la costumbre de pasar por la sala de prensa al final de un choque. De hecho, el central no jugaba en el Heliodoro desde el encuentro ante el Xerez de la temporada pasada (7 de junio). Esta temporada sólo gozó de dos oportunidades y ambas fueron lejos de la isla: (Espanyol y Celta en Copa). Culebras, que acaba contrato en junio, sigue dando ejemplo.