Liga BBVA | Athletic
Muniain abandera el nuevo espíritu del Athletic
El sábado cumplirá 17 años y lo hará con quince partidos oficiales como león. Iker Muniain es la sensación de la Liga. Brilla en San Mamés, a domicilio y en los encuentros de Liga Europea. El chaval está que se sale en un equipo que vive su mejor momento de fútbol de la última década.
Iker tiene ocho velocidades y lleva incorporado un GPS". Joaquín Caparrós hablaba el sábado con esa contundencia de la perla rojiblanca en la sala de prensa de La Romareda. El chaval había sido el detonante para que el Athletic sacase su mejor juego. Los leones fueron otros con el diablillo navarro en el campo. Bart Muniain estuvo muy por encima de lo que le pidió el técnico: el primer balón que tocó lo puso en la cabeza de San José para que el de Villaba marcase el 0-1. Luego, con el partido ya lanzado, el niño lideró el contragolpe que acabó en el gol de Susaeta. Fue tremendo. Nadie le podía parar. Técnico y directiva se frotan las manos por lo que tienen entre manos. Un diamante de altísima calidad que si bien todavía tiene recorrido para mejorar ya se ha convertido en un tipo espectacular.
El chaval apenas ha necesitado de un tiempo de adaptación. Descarado y habilidoso con el balón, Muniain disfruta cuando encara a sus rivales. Hace del fútbol un juego. Está limpio por dentro y se nota. La inocencia de su edad no va con lo que presenta en el terreno de juego, donde se muestra como un pillastre ante el que poco pueden hacer las defensas. O le cosen a patadas o se fían de que no tenga su día.
Asentado.
El primer día que apareció por San Mamés, el 30 de julio en la previa de la Liga Europea contra el Young Boys, llamó la atención lo sencillo que lo tuvieron los centrales del equipo suizo para frenarle. Carga, contacto y al suelo. El árbitro no tenía nada que pitar ante una situación semejante. El chico entendió que para quedarse con los de arriba necesitaba de otras armas y se puso a la tarea. Así que como lo de la pillería es innato, en cuanto ha mejorado en fortaleza y posicionamiento, el niño hace daño hasta a hombretones como David Navarro, al que la pasada semana robó la cartera para hacer el único gol del Athletic ante el Valencia.
El vestuario está encantando con esta bomba de relojería que tienen para reventar defensas. No se cansan de halagarle y de asegurar que hay futbolista para rato. Los veteranos también aprovechan para ponerle en situación de lo que es una carrera en la élite. Muniain, por ahora, es una esponja que no para de absorber lo que se mueve a su alrededor.
Caparrós ha encontrado su banderín. Ha dado con un chico que está llamado a marcar una etapa de buenas noticias para el club. Muniain lo pasa en grande. Igual que los que le ven sobre el campo.