Es el hombre, junto a José Mari Romero, del fin de semana. Alejandro Campano volverá a revivir su particular derbi ante el Betis, algo que no sucedió desde la campaña 2006-07, cuando el Nàstic militaba en Primera. En aquella ocasión el resultado fue de empate (1-1), pero el andaluz espera sonreír en esta ocasión: "Para mi sigue siendo un partido especial. Irá a verme la familia que tengo en Sevilla y eso también motiva. Este partido es bonito de jugar y, además, es un campo perfecto para nosotros".

El capitán no se fía de un Betis que, pese a estar inmerso en un mar de críticas, está a un paso del ascenso y tiene la mejor plantilla de Segunda: "Les falta paciencia. Se están precipitando mucho, porque no puede aspirar a estar desde la primera jornada en puestos de ascenso. Fíjense en el Zaragoza de la temporada pasada. No empezó bien, pero subió. El Betis estará al final de temporada arriba y, lo lógico, es que suba".

El jugador reconoce que "en casa nos cuesta porque los equipos se encierran y también notamos la presión, pero cuando pasen las jornadas y nos soltemos, seguro que la afición disfrutará". Campano no sólo es el capitán, sino la voz autorizada del vestuario. El domingo vibrará.

Se reivindica en mediocampo

Las estadísticas hablan por sí solas: Alejandro Campano ha jugado cuatro encuentros como medio derecho y ya suma dos tantos. El futbolista no esconde que es la posición en la que se siente más cómodo: "Me gusta estar cerca del área, debordar y centrar. De lateral no lo puedo hacer tanto como de medio", explicó. El fichaje de Fachan en el lateral ha liberado al sevillano, que ahora se siente muy feliz y dispuesto a tirar del carro del Nàstic. "Vamos bien, aunque generemos dudas en casa. Pero estaremos arriba, seguro". Campano es el jugador grana con más partidos.