Roberto Trashorras era, hasta el partido de Montilivi, el único jugador de campo que había disputado todos los encuentros de liga como titular. Sin embargo, en Girona le tocó sentarse en el banquillo. El de Rábade acata la decisión de Eusebio y evita polemizar sobre el tema: "Esto es un equipo y la plantilla la conforman 23 jugadores. Me considero uno más y esta vez me toco a mí estar en el banquillo. No hay ningún tipo de problema por ello. Trabajo para jugar y, obviamente, cuando no lo hago me cabreo. No obstante, por encima de todo está el grupo y lo importante es que se ganó".

El lucense era un fijo en el esquema de Eusebio y hasta el sábado parecía intocable. Trashorras es consciente de su rol en el equipo, pero no se da mayor protagonismo: "No me considero un jugador imprescindible, ni mucho menos. Me tomo esta semana con intensidad, pero igual que lo he hecho siempre. Luego será el entrenador el que tenga que decidir quien juega. Sigo considerándome un jugador importante y voy a intentar seguir trabajando como siempre".

Todo hace indicar que la suplencia del mediapunta será fugaz y que el próximo domingo volverá a ser titular: "Nunca se sabe si volveré al once este domingo. Michu, por desgracia, no puede jugar esta semana, pero hay otros compañeros que también pueden jugar en esa posición. Tampoco me considero suplente por no jugar en Montilivi".

Compromiso.

Trashorras asegura que tiene la misma ilusión que el día de su presentación en Balaídos: "Yo tengo las mismas ganas desde que firmé por el Celta. Mi compromiso con este club es al cien por cien y creo que lo he demostrado desde el primer momento. Ahora no voy a tener más ganas que antes porque el técnico me haya dejado fuera en un partido".

"El técnico está capacitado para sacar esto adelante"

Roberto Trashorras se unió al sentir general de la plantilla y aprovechó para defender la continuidad de Eusebio Sacristán: "El técnico está trabajando como desde el primer día y yo lo veo muy capacitado para sacar al equipo adelante. Nos conoce al cien por cien y no creo que tenga que salvar bolas de partido. La plantilla no quiere ni oír hablar de cambio de entrenador. Por mi experiencia considero que no sería bueno y creo que el entrenador está haciendo un buen trabajo. Quizá los resultados no están acompañando, pero hay que darle confianza. Esperemos que lo de Girona sea un punto de inflexión".