Liga BBVA | Athletic 1 - Valencia 2
El Valencia rompe la racha del Athletic y se coloca tercero
Los de Emery lograron los tres puntos en un partido en el que ambos equipos libraron una dura batalla sobre el césped. Los locales se adelantaron con un gol de Muniain, pero los visitantes remontaron con tantos de Villa y Mathieu. Los de Caparrós jugaron el último cuarto de hora con un jugador menos por expulsión de Koikili. David López mandó al poste un penalti en la recta final que pudo significar el empate.
Con San Mamés lleno hasta la bandera, los enrachados Athletic y Valencia se enfrentaban en un duelo fraticida por seguir lanzados en la Liga. Una victoria para los de Caparrós suponía seguir enganchados al tren de cabeza y seguir soñando con firmar una temporada mucho más correcta que en los últimos años. Para los visitantes, los tres puntos significaban robarle la tercera plaza al decadente Sevilla. Las bajas de Ustaritz y Gurpegui obligaron al técnico local a modificar su once tipo dando entrada a David López y al resucitado San José. El once inicial bilbaíno fue el formado por Iraizoz, Iraola, San José, Amorebieta, Koikili, David López, Orbaiz, Javi Martínez, Yeste, Susaeta y Llorente. En el Valencia, con la notable ausencia del lesionado Silva, formaron César, Bruno, Navarro, Dealbert, Mathieu, Marchena, Albelda, Joaquín, Mata, Pablo Hernández y David Villa.
Tras unos primeros minutos de pugna por hacerse con el mando del partido, fue el Valencia el que encerró al Athletic en su área mostrándose muy dinámico y peligroso en sus acciones de ataque. La embestida inicial de los de Emery se fue disolviendo a medida que los 'leones' se asentaron sobre el terreno de juego. La bajada de intensidad valencianista fue acompañada por la subida de la misma por parte del Athletic. Sin un dominador claro, las llegadas a ambas áreas se resumían en jugadas a balón parado en las que las zagas lograban salir airosas una vez tras otra. Hubo que esperar hasta el minuto veinte de partido para ver la primera ocasión clara de peligro. Fue tras una buena jugada individual de Pablo Hernández y la tuvo en sus botas Mata, que disparó fuera de forma acrobática.
El Valencia daba sensación de peligro constante cada vez que rebasaba la línea de tres cuartos, mientras que el Athletic llegaba a las inmediaciones del área de César con cuentagotas. La parroquia local se dio cuenta de ello y comenzó a dar aliento a los suyos como es habitual en ella. Los ánimos de La Catedral tuvieron un efecto inmediato en los hombres de Caparrós, que gozaron de su mejor ocasión en el ecuador de la primera mitad en un intento de despeje de Dealbert que cerca estuvo de sorprender a César. El arreón previsto por los rojiblancos se vino abajo a quince minutos del descanso con la lesión de su hombre de referencia en ataque, Fernando Llorente. El nueve de los 'leones', que se retiró con un golpe en la cadera, fue sustituido por De Marcos.
Sin Llorente en el césped cambiaba el panorama para los locales y Javi Martínez pasó a ser la referencia en las jugadas a balón parado y en los balones colgados. Por aquel entonces, el Valencia se olvidó de sus obligaciones ofensivas mostrando problemas en la elaboración de su juego y cediendo terreno a un Athletic que gozó de una buena ocasión con un disparo desde la frontal de Yeste que se fue por encima del larguero de César. Pocos minutos después, fue De Marcos el que probó suerte con un disparo que se fue muy desviado. En eso se quedó el intento de llevar la iniciativa por parte del conjunto local, en disparos desde la frontal que no ponían en aprietos a su rival. Con un Athletic que no mostraba una idea definida de juego, daba la impresión de que el Valencia podía golpear justo en el momento que abandonase su indolencia en ataque. Al descanso, la actuación local se resumía en un 'quiero y no puedo' y la visitante en un 'puedo y no quiero'.
Tras el intermedio, tan sólo cuatro minutos tardó Caparrós en retirar a Susaeta para dar entrada al que se ha convertido en el jugador revulsivo del Athletic, Iker Muniain. El Valencia se mostraba seguro en su juego, pero falto de la creatividad suficiente para herir a los 'leones'. Con el paso de los minutos el partido comenzó a subir de revoluciones debido a un par de jugadas polémicas. El fallo de Villa, solo ante Iraizoz, fue la antesala del primer tanto del partido. El rechace de un disparo de Javi Martínez desde dentro del área fue aprovechado por el joven Muniain para poner en pie San Mamés. Pero la alegría local duró poco, justo el tiempo que tardó Villa en enmendar su error anterior con una volea picada a pase de Pablo Hernández que devolvió la igualada al marcador.
Coincidiendo con el gol visitante, Caparrós retiró del campo a Orbaiz para dar entrada a Iturraspe. Cambio de hombre por hombre que no significó ninguna modificación en el dibujo táctico de los 'leones'. Con el empate, el Valencia se rehizo y se vino arriba haciéndose con el dominio del balón y del juego. Enfrente, un Athletic batallador y en inferioridad numérica por expulsión de Koikili, que no estaba dispuesto a renunciar a nada hasta el pitido final. A diez minutos del final Emery retiró a Joaquín para colocar al gigantón Zigic como acompañante de Villa y buscar así otra vía para ganar el partido, el juego aéreo. Precisamente en un balón colgado en el que intervino el jugador serbio llegó el tanto que significó la victoria visitante. Un rechace de Iraizoz fue recogido por Mathieu para meter los tres puntos en la saca visitante con un empalme perfecto desde la banda izquierda.
Un penalti que no exisitió, pero que sí señaló Rubinos Pérez, de David Navarro sobre Javi Martínez se convirtió en la ocasión de oro para los locales de rescatar un punto cuando lo tenía todo perdido, pero David López falló en la ejecución de la pena máxima estrellando el balón en el poste. El Athletic rompe de esta forma su racha de victorias y el Valencia se coloca tercero en la clasificación.