El macho ante la galaxia

Liga BBVA | Real Madrid - Almería

El macho ante la galaxia

El macho ante la galaxia

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Hugo desafía a un Madrid con Higuaín y Benzema en punta

La pregunta, a bocajarro, es si el Real Madrid repetirá el sistema y la actitud del Camp Nou. Si lo hiciera, si aquel partido hubiera significado un cambio de estilo y mentalidad, hoy nos encontraríamos con un equipo avasallador, con la defensa muy adelantada, aplicado en el robo y listo para el ataque. Si ese equipo puso contra las cuerdas al Barcelona, qué no hará con otros rivales más frágiles y qué no logrará en el Bernabéu.

La teoría da buenas razones para el optimismo (madridista) y, aunque la experiencia nos dice que la concentración se estimula más con unos colores que con otros, es de esperar que Pellegrini insista en lo que funcionó. Es decir, reducir el campo, adelantar la zona de robo y pegar a Cristiano a la banda (cualquiera vale). Le tocará, por contra, corregir el desorden táctico de Marcelo, aliviar la baja de Kaká (pubalgia) y cubrir la ausencia de Lass, que cumple castigo por su desahogo en Barcelona.

Y como suele suceder, las novedades en el equipo titular vuelven a ser foco de atención y polémica. Diarra y Granero son opciones (defensiva y ofensiva) para relevar a Lass, pero Gago, ausente de las dos últimas convocatorias, también reclama, amargamente, una oportunidad. La cercanía del Mundial propiciará situaciones parecidas.

La baja de Kaká es más profunda porque significa volver al 4-2-2-2, sistema con dos puntas (esta vez Higuaín y Benzema) que sólo se aligera con una rigurosa ocupación de las bandas; de otro modo se repetirá el penoso atasco.

El viaje.

El Almería, que esta misma mañana (11:30) llegará a Madrid en vuelo chárter, se presentaría al partido con el sigilo de los conejos de indias si no fuera por Hugo Sánchez. Su presencia aporta una promoción incalculable para el club, pero al tiempo sitúa a su equipo como un enemigo peligroso por la sencilla razón de que Hugo lo era. O dicho de otra forma: el macho es una motivación para el contrario.

Debió serlo para el Athletic, que le goleó en Almería (1-4) y también para los últimos rivales, que han dejado el balance en cuatro partidos perdidos de cinco, sin contar la doble derrota en la Copa frente el Hércules.

No anda bien el Almería, como se puede apreciar (12 puntos en 12 encuentros), aunque todavía le separen cinco largos puntos del descenso. El problema, como siempre en estos casos, tiene que ver con la debilidad defensiva, con la falta de automatismos para protegerse a balón parado y, en definitiva, con la baja autoestima.

El Almería, no obstante, cuenta con jugadores que ya han puesto en problemas al Madrid, y me refiero a Crusat o Uche, pesadillas habituales en tantas tardes.

No escasean los alicientes y sobre todos ellos hay que insistir en el permanente aliciente de Cristiano, premio AS y de nuevo titular en el Bernabéu, algo más en forma, algo más curado y algo más perfecto.