Liga Adelante | Betis - Villarreal B
Emaná ha elegido el buen camino
El camerunés repetirá en ataque en el partido aplazado en su día por la gripe A.
El partido de esta noche en Heliópolis ni es de Liga de Campeones ni tampoco de la Copa del Rey, aunque se dispute entre semana, pero el Betis sabe a la perfección que hoy tiene la oportunidad de reengancharse a la zona de ascenso, tras pasar unas semanas tormentosas, con gripe A incluida. Sería algo así como su particular partido europeo, pero en Segunda, muy lejos de la realidad y de la gloria. Porque ya hace tiempo que por La Palmera no ven ninguna señal que huela a Europa, ni parece que el rumbo cambie pronto. El infierno quema tanto que incluso muchos se contentarían con ser hoy el Xerez, que también juega... pero ante el Barça. Y en Primera.
La gripe A, la encargada de aplazar en su día este encuentro, ya es historia, como el último triunfo ante Las Palmas. Esos tres puntos, vitales y reconfortantes, han devuelto cierta sonrisa a los verdiblancos, pero sobre todo se ha apreciado con más determinación en Emaná. El camerunés parece haber olvidado sus meteduras de pata fuera del terreno de juego y quiere ganarse el cariño de la afición con goles y juego. El pasado domingo ya creó un ambiente de buen rollo con su calidad y trabajo y sólo faltó que su sutil remate por encima de Assmann acabase en gol. Hoy, ante un Villarreal B crecido y sin miedo a nada, Emaná jugará como si fuese la final de la Copa del Mundo y vistiese la elástica de Camerún. Lo ha dejado entrever en el vestuario y la grada le espera de buenas. Luego pasará lo que Emaná quiera que pase.
Quien está tranquilo es Tapia, al que la presión le ha llegado antes de lo que esperaba. El cordobés acertó de lleno ante los canarios en uno de esos partidos en los que sólo vale ganar y hoy repetirá once, confiando en los suyos. Eso sí, hasta última hora tendrá la duda de Juanma, aquejado de una fiebre. Rodri, canterano valiente donde los haya, espera otra vez su momento, que se lo ha ganado con creces. Mehmet Aurelio, deseoso de estrenarse ante su gente, ha pedido disponer de minutos, como ya ocurriese en Elche.
Enfrente estará un típico filial, al que le va eso de tocar la pelota y poner nervioso a cualquiera. Es lo que tiene jugar sin presión, todo lo contrario que el Betis. El equipo de Garrido ha ido amoldándose con garantías a la categoría hasta tal punto de llegar sin miedo a Heliópolis, donde le espera el 'grande' de Segunda. Marco Ruben y Joan Tomán pondrán el peligro en el ataque amarillo. Pero nadie en el Betis se fía de ellos. Y es que ya han aprendido la lección de los Abasolo y compañía, por ejemplo. O eso parece.
A las 22:00 horas, cuando Xerez y Barcelona, en Primera, disputen un partido adelantado por el Mundialito, el Betis ya sabrá si la recta final del terrible 2009 será tranquila o habrá más tormentas. Todo depende del propio Betis.