El Sevilla es una máquina de producir alegrías. Las semanas y los partidos refuerzan su fuerza y vitalidad y dibujan un futuro inmediato prometedor. Los movimientos firmados en el último mes han sido fantásticos y algunos entregarán resultados de un valor incalculable. La clasificación para disputar los octavos de la Liga de Campeones, el pulso descarado planteado a Madrid y Barça y la revalorización internacional de Perotti y Navas dan brillo al presente sevillista.

El debut de los dos extremos con Argentina y España podría ofrecer consecuencias extraordinarias. Si Perotti y Navas fuesen al Mundial, ambos se convertirían en dos cheques en blanco. El argentino pasará a ser una pieza cotizada y el canterano abriría la posibilidad de recibir ofertas externas. Para una entidad que admite que el futuro pasa por vender bien, el estreno de los jugadores hace brillar los ojos de los economistas del club.

La aventura deportiva va cubriendo etapas. Liquidó la Copa como un trámite, se paseó por Europa y aprieta la Liga en lo más alto. El Sevilla enfila los octavos de la Champions mostrándose muy superior en el grupo. El Fenerbahçe aún se mantiene como un mal recuerdo que el equipo espera eliminar con la inercia actual. El mes de noviembre está confirmando también a los sevillistas como una alternativa seria al título. Del Nido sueña con dar el gran golpe. De momento, el panorama invita a disparar la ilusión.

Pendiente del derbi del domingo

El Sevilla es el único equipo que planta competencia a los dos grandes. Ha sido capaz de mantener las distancias con Madrid y Barcelona, a los que ha recortado puntos en las últimas jornadas. Se ha colocado tan cerca que el sábado por la noche, después de enfrentarse al Málaga, tendrá la posibilidad de dormir empatado a puntos con el actual líder, el Real Madrid. A la espera de lo que ocurra en el gran derbi del domingo. No podrá salir de la jornada el primero, pero cada día está más cerca.