"Jugando juntos, quizás ayudaríamos más al equipo"

La Tertulia casi necesitó un traductor de portugués, teniendo en cuenta que los protagonistas hablan en esta lengua, a pesar de que sus procedencias sean Brasil y Angola, o precisamente por esto, ya que son dos paises en los que la influencia de Portugal es evidente, tanto en la cultura, como en el idioma. Aún así, Diego Costa y Manucho se hicieron entender y configuraron una conversación salpicada de cordura y bromas, con un componente principal de alegría; ingredientes lógicos que proporciona la juventud, el desparpajo y el atrevimiento.

Entrando en materia, Costa empezó hablando de su adaptación y la de Manucho a la Liga española:

"Todas la competiciones son distintas, la española, la inglesa e incluso la Segunda División, aunque también hay jugadores ahí de mucha calidad. Para mí ha sido un poco más fácil, pero Manucho es muy bueno y, en poco tiempo estará a gran nivel, si es que no lo está ya".

El africano también habló de adaptación, ya que su bagaje es la liga de su país; la Premier inglesa, en Manchester United y Hull City; y en Grecia, con Panathinaikos:

"Es una buena liga, muy diferente a la inglesa. Allí hay más contacto que aquí. Hay que calcular bien todos los movimientos. Lo que los árbitros consideran falta es diferente en las dos competiciones, y esto me confunde".

Manucho comenzó siendo titular en Almería, pero ha sido Costa el que ha explotado y está teniendo minutos. El angoleño se muestra paciente y sabe que tendrá minutos, y está fuerte anímicamente:

"Me ha afectado un poco, como a cualquier jugador que pierde la confianza. Son fases. Ahora está jugando Diego y para mí también es bueno. Las cosas mejorarán".

Manucho y Costa están seguros de que, jugando juntos, estarían muy cómodos. El brasileño valoró esta opción:

"Nos es porque sea mi compañero, pero siempre que Manucho entra en los partidos, el juego del equipo mejora. Lo de jugar juntos es una cuestión que tiene que decidir el míster y no yo. Lo que yo tengo que hacer es continuar como estoy, y si surge la opción de jugar juntos, intentar hacerlo lo mejor posible. En pretemporada creí que lo tendría difícil por la calidad de Manucho, pero el míster me ha dado las oportunidades que necesitaba y estoy intentando responder. Tengo que estar muy despierto, pues hay muchos compañeros que te pueden sustituir".

Manucho apuntó su opinión sobre esta cuestión:

"Jugar los dos arriba obliga a la defensa a estar más pendiente de nosotros e incluso hace que los jugadores del mediocampo también deban bajar más a defender y dejan más libre a nuestros centrocampistas. Es mejor para nosotros y nos encontramos bien con este sistema".

Divertidos.

Lo cierto es que nuestros invitados muestran siempre su buen humor y no pierden la sonrisa, algo que Manucho explica que va con el carácter angoleño y brasileño y que por eso el africano hizo el avión al salir al campo en el encuentro ante el Deportivo:

"Mi padre trabaja en temas relacionados con los aviones, pero no tiene nada que ver con esto. Es mi celebración típica en los goles".

Costa, por su parte, baja montado en la barandilla de la escalera que da acceso a la zona mixta del estadio y los vestuarios, como si de un tobogán se tratara, cuando acaba el entrenamiento:

"Después de los entrenamientos, da pereza bajar las escaleras; lo controlo y no pasa nada, no es peligroso, aunque lo voy a dejar de hacer porque creo que algunos desean que me caiga (risas)".

Más en serio, Diego Costa se refirió al Valladolid y las posibilidades de mejorar en esta campaña:

"El equipo está bien, hay jugadores con mucha calidad. Las cosas no están saliendo demasiado bien hasta ahora, porque somos muchos jugadores nuevos y aún no nos conocemos bien. Ya hemos jugamos 10 partidos de Liga y dos de Copa y, en breve, el equipo dará su verdadera medida".

Manucho habló de su amplia experiencia internacional:

"Me adapté bien al fútbol inglés, ya que no necesitaba usar la fuerza y me centraba en el balón; jugar en Old Trafford es un sueño para cualquier jugador. En España el fútbol es al contrario, pero creo que seré capaz de adaptarme bien y haré buenas cosas en esta Liga. En Grecia hay buen fútbol, pero es muy duro. De las ciudades que he conocido me quedo con Atenas, una ciudad muy bonita, aunque el idioma era un poco difícil".

Costa traía fama de conflictivo y, de momento, ha demostrado, como dice Mendilibar, que es un cacho de pan, aunque le cuesta mantener la compostura cuando recibe tantos golpes, como ante el Espanyol:

"Los últimos años estas acciones me costaban tarjetas y yo era el perjudicado. Estoy aguantando bien, pero es difícil aguantar tantos golpes y que no piten nada. Me enfado un poco, pero me aguanto. Mendilibar me habló al llegar y dejó claro que si hago alguna tontería de estas, el perjudicado seré yo. Tengo que utilizar la cabeza y estar tranquilo, sin caer en provocaciones. Jugué dos años en Segunda y tenía unas ganas tremendas de estar en Primera y el Valladolid me ha dado la oportunidad".

El Atlético de Madrid ya anunció que repescará a Costa, incluso ha aumentado su contrato con el brasileño, que está convencido que llegó a Valladolid en calidad de cedido:

"Vine cedido un año, aunque estaría a gusto aquí cinco. Tengo contrato hasta 2012 y ojalá juegue en el Calderón, pero lo que quiero es jugar, aquí o allí, pero en un club que me valore. No quiero estar en un club grande sin jugar".

Manucho habló de los 30 o 40 goles prometidos en su presentación y de las 'volatas':

"Yo entendí cuántos goles me gustaría marcar. Lo de esa cifra es un desafío que me puse y aún tengo tiempo de hacerlo, aunque 15 o 20 estarían bien también. De las 'volatas' ya me duele la espalda, pero sin problemas (risas)".

Finalmente, ambos hablaron de sus selecciones. Costa sabe que ir convocado con Brasil es difícil, pero Manucho está cerca de disputar la Copa de África, aunque su seleccionador está 'enfadado' con él y no le ha convocado esta vez:

"Le pedí disculpas al técnico y espero ir con mi selección y disputar la Copa de África en mi país, que es el anfitrión".