Muñiz respira: Apoño se invita ante el Zaragoza

Muñiz nunca ha podido trabajar con todos sus hombres en lo que va de curso. Las lesiones han ido mermando al equipo y siempre ha habido algún efectivo de baja. Pero poco a poco se va sumando gente. Dejan la enfermería la mayoría de los tocados y el técnico lo agradece. Ayer contó con casi todos sus futbolistas, incluido Apoño, el Cid albiceleste. El centrocampista malagueño se invita a la fiesta. Está harto de grada y quiere ayudar en el campo: "El entrenamiento no fue muy fuerte, pero tengo buenas sensaciones. ¿Ir con precaución? Ninguna, yo nunca me reservo. Si me entreno tengo que hacerlo al nivel de mis compañeros. Queda para el domingo, pero si estoy para entrenarme, también para jugar. En la grada me comen los nervios". Muñiz respira.

Apoño, pese a todo, no se siente salvador: "Porque yo esté en el campo, el Málaga no juega mejor". El asturiano no apretó demasiado a sus futbolistas, pero fue un alivio para él ver a Luque (tiene molestias en el abductor), Cuadrado, Hélder, Manolo y el propio Apoño integrados en el grupo. Sólo faltaron los internacionales Obinna, Duda y Edinho y los lesionados Edu Ramos y Jordi Pablo.

El medio: "No necesito hacerme más pruebas"

Apoño cree que ahora sólo le queda una cosa por hacer, entrenarse y sacar conclusiones. Las sensaciones dirán si juega o no. "Ya no me hago más pruebas, no puedo hacer una cada día, si no me voy a pasar la vida en la clínica", ironizó el mediocentro malagueño. Ahora, Apoño espera que todo quede en un mal recuerdo y no se reproduzcan sus problemas musculares: "El doctor (Juan Carlos Pérez Frías) habló conmigo y me dijo que todo salió bastante bien".