"Nunca me iré del Valencia por la puerta de atrás"

Cómo está Joaquín después del primer tercio de la temporada?

Personalmente estoy bien, todo lo que juego intento aprovechar las oportunidades que me da el míster y me siento fuerte, intentando jugar más y tener más minutos. Pero todo esto no puede enmascarar que el inicio no ha sido bueno para mí, sobre todo porque no estoy jugando en Liga.

De todas formas, se ha visto a un Joaquín muy implicado en los partidos que juega...

No queda otra, trabajar todos los días fuerte, estar callado y esperar que el míster me dé oportunidades. Estoy disfrutando jugando la Copa y la Europa League, tranquilo, fuerte mentalmente, ya nada me afecta. En estos momentos, hay que estar pausado y medir muy bien las cosas que me pasan y esperar que llegue mi momento para aprovecharlo. Un ejemplo es David Albelda. Esto es muy largo y pasan muchas cosas a lo largo de la temporada.

Se está hablando de un equipo A y un equipo B...

El Equipo A era una serie de televisión... Aquí no hay equipo titular y suplente, unos jugamos la Copa y la competición europea y otros la Liga, pero al final de la temporada todos tendremos oportunidades de jugar en las tres competiciones. Lo único que intento es estar bien y que el míster vea que estoy enchufado y preparado para dar el salto a ese equipo que juega en Liga.

¿Se hace duro para un futbolista jugar dos minutos de descuento como le ocurrió ante el Zaragoza?

Nunca me había pasado y cuando vieves una experiencia como ésta las sensaciones son tristes. Me fui muy jodido a casa, pero no por jugar dos minutos, que fuera en el descuento y para perder tiempo, sino porque se iba ganando por 3-1, con el partido controlado. La explicación no se la encuentro, pero el míster si hace un cambio así es porque ha visto algo que yo podía mejorar. Aquí me está pasando de todo y no sé qué más me puede pasar. Fue una situación triste pero no sólo para mí sino para cualquier futbolista que le pase.

¿Cree que le está pasando factura aquel desencuentro con Emery en Noruega ante el Stabaek?

No, Unai no es nada rencoroso y aquello está todo aclarado. El míster no le dio importancia, yo se la quité y punto.

Se lo digo porque han pasado muchas cosas en este sentido: hace un golazo en Alcoy y se lo da a Miku; le hace jugar los minutos de la basura ante el Zaragoza...

No quiero pensar así, son cosas que han pasado pero insisto no veo ninguna mala intención en Emery. Quiero seguir tranquilo, dedicarme a entrenar y jugar.

¿Cómo ve al equipo en este tramo de la temporada?

Creo que son 18 partidos oficiales y una sola derrota, pues el Valencia está demostrando que está en un momento muy bueno, hemos encontrado el equilibrio y en las tres competiciones está demostrando que es fuerte. Hay que seguir sumando y aprovechar esta racha positiva. Tendremos momentos difíciles y debemos coger el mayor número de puntos.

Son el mejor visitante de la Liga, pero llegan dos salidas duras en Pamplona y Bilbao...

Ganar en Málaga, Almería y Valladolid no es nada fácil, es jodido vencer allí. Estamos sacando resultados muy buenos fuera, pero es cierto que las dos siguientes salidas serán nuestro verdadero termómetro fuera de casa porque son campos complicadísimos.

La gente se queja que el equipo que juega en Copa y en Europa baja sus prestaciones, ¿notan la falta de minutos?

Claro que se nota. En mi caso no tengo el ritmo de partidos, juego a tope 70 minutos y luego notas los gemelos duros porque te falta. El jugar te lo da todo, te da el ritmo, la confianza, la tranquilidad... No es lo mismo jugar cada cuatro días que cada 10. El que juega tiene la varita mágica en la mano porque mejora partido tras partido.

¿Le molesta que se diga que es muy fácil jugar bien ante el Alcoyano o el Slavia de Praga?

Ganar en El Collao no es fácil, mira el Real Madrid contra el Alcorcón. Claro que molesta porque son las oportunidades que tengo para demostrar mi valía y si no juego bien esos partidos, cuándo tengo que hacerlo. Los rivales no son el nombre, tienen un trabajo detrás importante y no es fácil ganarles. Hay críticas que incordian porque si juego bien es porque el rival es un desastre, que si no juego es porque no estoy implicado, paso de todo eso y sólo me dedico a entrenarme y a esperar en silencio.

¿Hay plantilla para las tres competiciones?

Sí que la hay, somos 25 futbolistas de nivel en el Valencia. El míster nos está dando minutos en la Copa y en Europa a los que no jugamos en Liga y se agradece. Son tres competiciones muy duras y hasta ahora se está demostrando que hay equipo para luchar hasta el final en las tres.

Habla que pertenece al equipo que lucha por Europa y la Copa, pero si consiguieran llegar a semifinales en estas competiciones, ¿el míster seguiría confiando en él o cambiaría al de Liga?

No lo sé porque a mí eso ya me pasó el año de Koeman. Jugué en todos los partidos de Copa y en la final no disputé ni un minuto. Aquello fue, hasta el momento, el palo más gordo que me he llevado en el fútbol, mi cara era un poema en el Vicente Calderón.

Se le está viendo muy comprometido y Emery lo destacó en rueda de prensa...

Yo no miro el rival que tengo delante, miro los minutos que tengo y es la oportunidad que debo aprovechar, salgo siempre al campo consciente de que ese partido puede ser el que me permita dar el salto al equipo titular, así es.

Siempre ha destacado que le gustaría regresar al Betis, pero ¿lo haría estando en Segunda División?

Nunca he escondido mi deseo de volver, pero es complicado que vuelva si está en Segunda porque me ha costado tanto hacerme un hueco en Primera que lo veo un paso atrás. No sabe la de kilómetros que llevan mis piernas para ser el que soy. No se me pasa por la cabeza irme y quiero salir del Valencia con otras sensaciones de las que tengo. Nunca, y repito a navegantes, nunca me iré de este club por la puerta de atrás.

El Valencia sigue deslizando que escucharán ofertas por usted...

Lo llevan diciendo desde la primera temporada que llegué (se ríe). Hay que ser realistas, éste es mi cuarto año aquí y por muchas cosas no he tenido esa repercusión que se esperaba. El fútbol son expectativas y si la gente espera de ti un 10 y rindes a un 9 pues siempre dirán que no estás al nivel. Soy muy cabezón y repito el día que me vaya lo quiero hacer por la puerta de adelante y dejar otras sensaciones que estoy dejando en la actualidad.

Le quedan dos años de contrato...

Y los quiero cumplir. Vamos, los voy a cumplir, no me voy a ningún sitio. Firmé seis años para cumplirlos y quiero hacerlo con alegría y demostrando todo lo que soy. Para salir las circunstancias tendrían que ser muy diferentes a nivel personal. Ahora que son adversas sigo empeñado más que nunca en cambiar mi imagen, dar el do de pecho y trabajar para ganarme un sitio en el Valencia.

¿Todo esto que le está pasando le ha hecho madurar?

Sí, mucho. De todo se aprende y de lo malo mucho más porque saca lo mejor de ti. En los momentos jodidos se aprende más y se hace uno más maduro. Estoy pensando mucho más las cosas, recapacitas, tienes un mayor equilibrio entre la mente y el cuerpo, buscas la tranquilidad e intento centrarme para estar al 100%, salgo muy poco y estoy más centrado que nunca en mi trabajo porque sé que es lo que va a dar volver al terreno de juego a disfrutar, que es de la única manera que me siento feliz. Ahora no lo soy.

Joaquín ha perdido esa eterna sonrisa...

No del todo porque soy un tipo risueño, pero sí que es verdad que la he perdido porque estoy atravesando momentos malos y me cuesta sonreir ya.