Clasificación Mundial 2010 | Egipto 2 - Argelia 0
Una docena de heridos y medio centenar de coches destrozados tras la victoria de Egipto
Los dos goles marcados por Egipto, que han forzado la celebración de un partido de desempate, previsto para el próximo miércoles en Sudán, desataron la euforia egipcia y la desesperación de la afición argelina, provocando incidentes en el estadio y sus alrededores, la embajada argelina en El Cairo e incluso en la ciudad francesa de Marsella.
La victoria de anoche de la selección de Egipto frente a la de Argelia, en la fase clasificatoria para el mundial de Sudáfrica del 2010, ha dejado una decena de heridos, medio centenar de coches destrozados y numerosas quejas de la federación argelina.
Alrededor del Estadio Internacional de El Cairo, donde se concentraron miles de personas que no pudieron acceder al rebosante estadio, la afición celebró los goles y la victoria con gritos, fuegos artificiales y saltos, incluso encima de los vehículos de los conductores que los habían aparcado en los alrededores del campo. Según informa hoy el diario egipcio "Al Masry al Yom", al menos 50 coches quedaron destrozados.
Asimismo, presa de la euforia, los aficionados intentaron irrumpir en el estadio para compartir la victoria con los jugadores de la selección nacional. Sin embargo, se encontraron con la oposición de los agentes de seguridad, lo que acabó en un enfrentamiento en el que una decena de personas resultaron heridas, de las cuales siete tuvieron que ser hospitalizadas.
Los policías antidisturbios se vieron obligados a intervenir también para evitar que la afición egipcia atacara a los argelinos que se encontraban en el campo, al parecer, después de que un seguidor de la selección argelina quemara una bandera egipcia, según el diario estatal 'Al Ahram'.
La embajada argelina en la capital egipcia también se convirtió anoche en una fortaleza infranqueable. Las calles de los alrededores fueron cortadas y numerosos policías antidisturbios montaron guardia toda la noche para evitar altercados. Y es que el ambiente antes del encuentro llevaba días caldeándose y la situación alcanzó el máximo grado de tensión cuando los jugadores argelinos acusaron a un grupo de aficionados egipcios de atacar con piedras el autobús en el que se trasladaban del aeropuerto al hotel, el jueves por la noche.
La agresión dejó cuatro heridos entre las filas argelinas. Sin embargo, la prensa egipcia ha insistido en que todo fue un montaje de la selección argelina para crear más tensión. Las quejas argelinas no se terminaron aquí, y la federación de fútbol de ese país ha pedido a Egipto que le devuelva los 34.000 dólares que el equipo pagó por alojarse en El Cairo y los 6.000 por entrar en el país, en compensación por el "mal trato" recibido por el país anfitrión, según "Al Masri al Yom".
En medio de esta polémica, que promete continuar hasta el próximo miércoles, cuando ambos equipos se encuentren de nuevo en Um Durman, en Sudán, el Ministerio de Aviación Civil ha anunciado la implantación de un puente aéreo a precios reducidos entre El Cairo y Jartum, vecina de Um Durman.
La selección egipcia tiene previsto viajar hoy mismo a Sudán y la argelina, lo hará entre hoy o mañana, sin hacer escala en Argel. Igualados a puntos y a goles tras la fase clasificatoria del Mundial de Sudáfrica de 2010, Argelia y Egipto se jugarán el miércoles el pase definitivo a la fase final.
El partido cobra una relevancia especial en la región, porque de él saldrá la única selección que representará al mundo árabe en el próximo mundial.
Fuertes disturbios también en Marsella
Al menos ocho personas fueron detenidas este sábado en el puerto de Marsella como consecuencia de los fuertes disturbios registrados al término del partido de repesca para el mundial de fútbol disputado entre Egipto y Argelia, según informó un portavoz de la Policía.
Al menos quinientos agentes fueron enviados al puerto de esta localidad francesa, que cuenta con una importante población de origen magrebí, para controlar a los exaltados, quienes incendiaron con bengalas al menos ocho barcos y arrojaron piedras contra las fuerzas de seguridad, añadió la misma fuente.
El partido, disputado en El Cairo, terminó con victoria de los locales (2-0). Los disturbios comenzaron después de que varios jóvenes de origen argelino reaccionaran con violencia a la derrota de su selección, que encajó ambos goles en los minutos finales del encuentro, indicó la misma fuente.
La mayoría de las detenciones se produjeron por el lanzamiento de piedras contra los efectivos policiales, tan solo un individuo fue arrestado por otro motivo: prender fuego a un contenedor de basura.