"Ya no queda nada del Navarro de la sanción"

Muchas veces en la vida tienes que marcharte fuera para que sea reconocido tu trabajo. Esto es lo que le ha pasado a David Navarro, ya que su paso por Mallorca le cambió la vida. Se marchó casi como un proscrito y ha regresado mostrando al mejor Navarro que se recuerda. "En Palma encontré la madurez deportiva y personal, nació mi hija y me ayudó. No queda nada de aquel David de la sanción de Burdisso. Aquel era un Navarro con muchas ganas pero que me pasó factura, cometí un fallo. Ahora estoy más tranquilo y asentado". Esta mejoría se ha notado notablemente en su rendimiento dentro del campo.

Junto con Ángel Dealbert ha echado el cerrojo de la zaga valencianista y suman ya cuatro partidos consecutivos de Liga y otro de Copa del Rey sin encajar. "Ya no es una casualidad, las cosas nos van bien en ese sentido, pero la culpa de esta mejoría no la tenemos los defensas ni el portero, sino todo el equipo. Hay que destacar la enorme actitud que están mostrando los delanteros y los centrocampistas a la hora de defender, son los primeros que quieren que dejemos la portería imbatida". Estos grandes números han dejado al Valencia como el mejor equipo del pasado mes de octubre y sólo cinco puntos del Barcelona. "Hemos logrado el equilibrio, el equipo está más concentrado y nos mostramos sólidos. Ni hace un mes éramos tan malos ni ahora tan buenos, nos faltó un poco de paciencia al principio", destacó.

Navarro regresó este año con un objetivo personal, el de triunfar aquí y un sueño: poder debutar con la Roja. "Tengo una espinita clavada con la Selección porque fui pero no puede debutar. Trabajo mucho para rendir al máximo y esperar esa llamada. Nadie me quitará de la cabeza que he vuelto con la idea de ser importante. Estoy intentando aprovechar mi oportunidad". El jueves tendrá una nueva ocasión ante el Slavia para demostrarlo y Navarro sabe que hay que aprovechar la dinámica del equipo para ganar en Praga. "Hay que ganar, cada partido que pasa ya no vuelve y cada choque es el más importante de la temporada. Hay que encarrilar el pase en Europa".

Ya le llaman Pichichi en el vestuario ché

Un tanto de David Navarro ante el Málaga le dio los tres puntos al Valencia en Liga y le dejó una jornada más en los puestos de Champions. Para el valenciano su objetivo personal es el de dejar la portería a cero, pero es un honor marcar y que sus goles sirvan para sumar de tres en tres. "También es importante para mí hacer goles, defensivamente estoy contento por el trabajo que estamos haciendo pero un gol te ayuda más para coger confianza". Ya lleva dos goles en partidos oficiales y se ha convertido en el único defensa ché que ha logrado marcar. De hecho en el vestuario ya le llaman Pichichi. "Sí, me llaman así porque he marcado en Europa y en Liga. Es curioso pero todos los goles que he marcado en mi carrera excepto uno contra el Getafe han sido con la cabeza, me gusta rematar. El míster siempre me dice que aproveche más mi altura".