Quique debuta sin Forlán ni ambiente en Marbella

Que el Atleti ya no es lo que era lo demuestran cosas como la de hoy, cuando visita a un Segunda B como el Marbella, con un estadio no muy grande (6.380 localidades) y unos precios razonables (de 20 a 60 euros) y no se espera más que unos dos tercios de entrada. No ayuda esta anticlimática Copa a ida y vuelta, pero da que pensar.

En este frío ambiente debutará Quique Sánchez Flores. El calendario le da un pequeño respiro inicial antes de visitar San Mamés y recibir a Chelsea y Real Madrid en los tres siguientes partidos y él aprovechará para darle un descanso al fundido Forlán, que se quedará en Madrid. Perea es el único otro habitual que no entró en la primera lista del técnico, que sabe que no está el ánimo para experimentos ni confianzas.

Pocos cambios.

En principio, no se esperan grandes sorpresas en el once. A Quique le gusta jugar con dos medios puros de banda y dos delanteros, por lo que Sinama debería tener su oportunidad al lado de Agüero y Jurado puede perder su sitio en beneficio de Maxi o Reyes, al que el técnico ya tuvo en el Benfica y, con sangre, sudor y lágrimas, logró que diera un rendimiento aceptable. Sin tiempo para que su llegada se note en lo táctico, su primer impulso debe llegar de lo anímico.

Enfrente, el Marbella tampoco está para muchas fiestas. Empezó la Liga con cuatro derrotas seguidas y, aunque ahora lleva cuatro partidos sin perder, sigue metido en zona de descenso. Su estrella es Antonio Moreno, canterano del Sevilla que llegó a debutar con el primer equipo en Copa y que, tras un breve paso por el Partizán de Belgrado, es ahora el pichichi marbellí.

En resumen, todo suena a flotador para los rojiblancos, pero el propio Quique reconoce que no sabe si el Atleti ha tocado ya fondo. No se me ocurre un escenario mejor para descubrirlo. Si yo fuera del Marbella, iría al campo por si acaso.