Kalou deja moribundo al Atlético de Madrid

LIGA DE CAMPEONES | CHELSEA 4 - ATLÉTICO 0

Kalou deja moribundo al Atlético de Madrid

Kalou deja moribundo al Atlético de Madrid

El Atlético de Madrid volvió a patinar y cayó contundentemente en Stamford Bridge por 4-0. Kalou se encargó de romper el encuentro antes y después del descanso. Las jugadas a balón parado fueron una pesadilla para los de Abel.

Con otro aire pero con las mismas carencias de siempre. De poco sirve combatir al centro del campo del Chelsea con un trivote si los laterales londinenses suben cómodamente las bandas y si las jugadas a balón parado siguen siendo una autentica pesadilla para los de Abel. Aún así, a los jugadores del Atlético de Madrid hoy no se les puede reprochar falta de entrega en un partido igualado en la primera mitad que Kalou se ha encargado de romper en los momentos trascendentales y que deja a los madrileños prácticamente fuera de la siguiente fase de la Champions League.

Sólo valía puntuar y por ello Abel tiró de músculo en Londres con un centro del campo compuesto por Cléber Santana, Assunçao, Raúl García pero lo aderezó con el ataque rojiblanco que hace un año encandilaba Europa. Buen momento para que los delanteros alzaran el dedo y pidieran turno en un país que mira con lupa al uruguayo y al argentino. Aunque el Chelsea saltaba sin su estrella Drogba, todavía sancionado, la machada no iba a ser cosa de niños ante un equipo fuerte a balón parado, la pesadilla atlética, y con un centro del campo aterrador apuntillado por Anelka. Ante el francés iba a estar el canterano Domínguez que salió con la cabeza arriba sin mostrar nerviosismo en los primeros minutos de juego.

Y eso que el Chelsea no quiso cambio de guión y arrancó con el acelerador a tope, sorprendiendo con subidas de sus laterales como la de Belleti a los treinta segundos pero su centro desde el lado derecho sólo encontró las manos de Asenjo. No se amilanó el Atlético ante el poderío físico inglés y a los diez minutos de partido los seguidores blues ya habían visto a la pareja atlética en acción. Primero la tuvo Forlán tras un centro de Simao pero Peter Cech demostró su calidad al blocar el cabezazo del uruguayo en la línea de gol. Un minuto después llamó a la puerta el argentino con un derechazo que se estrelló en la red del meta checo después de fundir en carrera al zaguero Ivanovic.

El Atlético se lo iba creyendo. Por lo menos no se veían dudas en el juego, se enlazaban jugadas y se creaba peligro. Entonces, llegó la primera prueba de fuego para la zaga del Atlético cuando a los doce minutos se botó la primera falta lateral. La sacó Lampard y la pelota acabó en la red de Asenjo pero salió el colegiado Florian Mayer para invalidar el tanto por fuera de juego y falta de Kalou al cancerbero Asenjo.

El fútbol que se veía en Stamford Bridge era de ida y vuelta. Quizás el Chelsea fabricaba mejor fútbol pero el Atlético era el que disparaba entre los tres palos. Prueba de ello fue la excepcional triangulación al cuarto de hora entre Deco, Ballack y Kalou pero el marfileño, con medio gol hecho, cruzó en exceso y el balón salió por el lado diestro de la portería rojiblanca. El Atlético no necesitaba tantas filigranas para meter miedo a la grada del Chelsea. Con un balón largo a Forlán bastaba para que el uruguayo empalmara de primeras y pusiera en aprietos al equipo de Anceloti.

Según se acercaba el descanso, el ritmo de juego fue decreciendo y el Chelsea fue el más beneficiado porque consiguió taponar por completo las llegadas del Atlético y encima seguía llegando arriba, casi todas las veces por mediación de Kalou que parecía negado de cara a puerta. El marfileño volvió a probar a Asenjo en el 35 con un zapatazo lejano pero el cancerbero desvió a corner. En ese saque de esquina, Terry consiguió conectar de cabeza y Kalou, en fuera de juego, intentó poner rumbo al testarazo del capitán. Pero a la tercera fue la vencida. A falta de cinco para el descanso, una internada por el flanco izquierdo de Asley Cole acabó en un centro raso y el marfileño llegó como un portento para batir de una vez por todas a Asenjo.

Kalou mata al Atlético en momentos clave

Golpe moral para el Atlético de Madrid que se fue al descanso dando la talla pero con un gol en contra que obligaba a Abel a plantear una segunda parte más descarada en ataque y avisar de las peligrosas embestidas de los laterales del Chelsea. También debía advertir a sus jugadores de las embestidas de Essien pero no por las internadas sino por los recados que el ghanés fue dejando en las tibias de Raúl García y Assunçao. En lo meramente deportivo, el Chelsea reanudó el partido con un fútbol lento, esperando su oportunidad para acabar matando el partido. Y si el rival es el Atlético, las jugadas a balón parado era la apuesta más segura. Sin esperar lo más mínimo, a los siete minutos, y tras un zurriagazo de Anelka que Asenjó mandó a corner, el Chelsea asestó el golpe mortal. Un saque de esquina botado por Lampard fue a parar a Kalou que remató ante una tímida marca de un Antonio López pendiente de la zona en lugar del jugador.

Se acabó la hora del trivote y había que mover fichas para seguir vivos en competición europea. Jurado ingresó en lugar de Assunçao, mermado por el hachazo de Essien, y con él en el campo Agüero tuvo un mano a mano con Cech pero el argentino dudó en la finalización. Pero el Atlético parecía ya fundido y en el 69 llegó la especialidad de la casa a Stamford Brigde. Viendo que ningún jugador rojiblanco salía a taparle, Lampard soltó un latigazo desde la frontal que se coló por raso y acabó matando al Atlético. A partir de aquí, sustituciones en el Chelsea y la búsqueda del tanto del honor en el Atlético. A punto estuvo Maxi de maquillar el resultado en el 77 pero su disparó salió lamiendo el palo. El gol de la honra no llegaba y el Chelsea se empeñó en dejar bien claro cual es el mayor problema del Atlético. Esta falta lateral no hizo falta que la rematara ningún jugador londinense porque ya estaba Perea para cerrar el marcador con el tiempo cumplido. Derrota que deja al Atlético de Madrid con pie y medio fuera de Champions League y la crisis abierta en la casa rojiblanca.