El diario 'Sport' publicó ayer martes que el Barcelona podría estar muy cerca de asegurarse que Robinho se convierta en su fichaje estrella para el mercado invernal. Ya durante el verano, el brasileño, que no se ha adaptado completamente al Manchester City, sonó como refuerzo y como una petición de Pep Guardiola, interesado en cubrir la banda derecha y en contar con competencia de garantías para Henry, que ya tiene 32 años.
Cuando fallaron nombres como los de Ribery, Silva o Mata, la opción de Robinho se mantuvo viva hasta el mismo cierre del mercado, pero finalmente no hubo acuerdo porque el Manchester City pretendía obtener una cantidad que compensara lo invertido hace poco de un año para sacar al jugador del Real Madrid: 40 millones de euros. De esta forma se frustaron todos los intentos de acercamiento del Barcelona, que no encontró la flexibilidad necesaria en el club británico una vez que había convencido al jugador, decidido a regresar a España y demostrar lo que no pudo en su paso lleno de luces y sombras por el Santiago Bernabéu.
Ahora la situación parece distinta y el dueño del Manchester City, el jeque Mansour bin Zayed al Nahyan, podría empezar a mostrarse receptivo a una oferta cercana a los 35 millones de euros, cifra que la tesorería azulgrana podría, siempre según el diario Sport, estar dispuesta a asumir sin que le suponga un coste traumático.
En cuanto al jugador, el acuerdo parece mucho más sencillo y su sueldo, que mantendría en Barcelona, de 6'2 millones de euros netos, encajaría en el modelo económico del club y formaría parte del segundo nivel salarial del vestuario.
Robinho presiona para salir
De hecho, es el brasileño el que está forzando su salida del City lo antes posible. Según apunta el diario británico 'The Sun', Robinho no quiere continuar en la disciplina del club inglés y estaría solicitando su salida para el mercado invernal. No es la primera vez que el jugador muestra su descontento en el equipo pero sí es la primera vez que el Manchester City vería con buenos ojos su salida. Como apunta el tabloide, el buen estado de forma de Bellamy y las lesiones del brasileño podrían empujar al club a plantearse su salida y así recuperar gran parte de la inversión que hicieron por él.
Si el fichaje se realiza en enero finalmente, el Barcelona pretende pagar sólo el 50% de la ficha correspondiente a esta campaña 2009/10. El contrato sería largo, probablemente hasta 2014, para permitir al club rentabilizar el fichaje y al jugador encontrar estabilidad en Barcelona. De hecho la actitud del jugador habría sido otro factor decisivo para que el Barça acometa la operación, ya que se considera que Robinho es ahora una persona más madura y sosegada que en su periplo en el Real Madrid. Parece ser que tiene pareja estable y que sueña con una posibilidad de demostrar que es, como parecía en el inicio de su carrera, una de las grandes estrellas del fútbol mundial.
