¿Cómo asume esta nueva etapa?

Muy bien. Trato de aprovechar los minutos que me da el míster con mucha ilusión. Es una posición nueva y tengo que trabajar bien todos los conceptos del puesto.

¿Está ya adaptado al lateral derecho?

Me veo mejor cada día, pero me queda trabajo por hacer. Estoy contento de cómo me están saliendo las cosas.

Empezó jugando como delantero.

En los filiales del Real Madrid jugaba adelante y en el Sporting pasé a medio centro. Después de empezar la Liga, Preciado me puso de lateral. El míster confía en mí y tengo que trabajar para devolverle la confianza. Voy a seguir en esta línea para intentar que cuente conmigo.

¿Cuándo jugó de lateral?

En partidos oficiales, nunca. Sólo en algún entrenamiento de forma esporádica. Era algo nuevo para mí, pero le pongo unas ganas enormes, porque lo que me gusta es jugar. Creo que estoy en el buen camino.

¿Qué rival le creó más complicaciones?

En Primera División todos son difíciles de marcar, porque estar en la máxima categoría significa que son gente de calidad. El Valencia tal vez haya sido el más complicado, pero no sólo porque me tocó Mata por mi zona, sino porque también tenían caída a esa banda Villa o Silva, internacionales y con una calidad extraordinaria.

Crusat fue el primero.

Es un jugador con una rapidez endiablada. Había que estar muy pendiente de sus acciones para que no me desbordara. Ganamos y quedé satisfecho de mi trabajo.

¿Asustan algunos de los que tendrá enfrente?

Asustar, no, pero respeto, todo. Cristiano Ronaldo y Messi tienen unos niveles muy altos. Son de lo mejor del mundo.

El primero será el madridista.

A ver si tengo la suerte de jugar ese partido, pero antes tenemos que ir a San Mamés, que es en lo que estamos pensando.

Allí debutó en Primera.

Fue un partido especial, para el que estaba muy expectante, deseando que llegara cuanto antes. La parte negativa fue que perdimos 3-0 y, además, se lesionó Cuéllar. Tengo ganas de volver a Bilbao.

¿Hay tanta presión ambiental?

El público anima mucho y están encima del equipo. Es algo parecido al ambiente que tenemos en El Molinón. Es de los campos más complicados, pero si vamos concentrados, podemos sacar algo positivo.