"Llegué como estrella y no se me dio ese lugar"

o primero preguntarle por su estado físico. ¿Cómo se encuentra de la lesión que sufrió ante el Racing?

Estoy mejor, poquito a poco va rebajándose la inflamación y me gustaría estar contra el Barcelona el próximo sábado, pero hasta el lunes o martes que me tienen que realizar pruebas de nuevo no podré descartar la rotura.

Ahora mismo parece que el pulso Pablo-Joaquín en la banda derecha se lo lleva el castellonense por poco...

Pablo está jugando ahora y lo está haciendo muy bien. Yo espero mi oportunidad siempre para no desaprovecharla. El otro día pude tener minutos y ganamos y a la larga el que saldrá beneficiado es el Valencia.

Lo que más cuente de esa competencia sana es que sale favorecido el grupo...

Lo importante de que estemos Pablo y yo compitiendo por un puesto es que el que sale ganando es el equipo y luchamos por el bien del Valencia. Al final, lo importante es que gana el grupo.

¿Cuándo podremos ver al Joaquín maestro?

Cuando llegué al Valencia hace cuatro años fui un fichaje importante que costó mucho dinero y a la gente parece que le preocupa si a mí me afectó eso, pero no lo hizo porque el dinero que pagaron por mí es en lo que menos pienso. Yo llegué siendo una estrella pero por alguna cosa o por otra que no sabría explicar no se me puso en ese lugar. No he tenido la continuidad que quisiera para mantenerme en el escalón de nivel que me había ganado o mejor dicho del que ya venía. Al principio no jugué, luego pasó el problema de Koeman, este año no comencé de titular y por todo ello quizá no se me ha dado el valor que tenía. También reconozco que no todo es culpa del Valencia, porque yo tengo también mi responsabilidad en todo esto.

¿Por qué no se siente valorado como debiera?

No lo sé muy bien. En muchos momentos del pasado no se me dio el lugar que se me tenía que haber dado porque yo venía de jugar a un gran nivel en el Betis y tal vez por ello no se ha podido ver al Joaquín que el Valencia fichó. No me excuso y ya digo que yo también tengo gran parte de culpa, pero todo eso es algo que me afectó.

¿Le faltó cariño y le sobró estar tan presionado?

Está claro que igual, por lo que decía antes, no he tenido esa confianza que me haya podido hacer estar al nivel que yo estuve durante muchos años. Valorando todo este tiempo sí que es verdad que desgraciadamente no han sido buenos en mi carrera y que me ha afectado para todo. Siempre he intentado trabajar al máximo tanto para bien como para mal y lo he hecho siendo el primero. Si alguna vez he caído lesionado me he recuperado del tirón para estar lo antes posible a disposición del míster, pero también reconozco que ahora mismo el pasado poco importa y sólo debemos mirar el presente para hacer un gran año.

Pero a pesar de sus desencuentros con el técnico no negará que éste le ha cuidado...

Por supuesto y se lo he dicho a él cara a cara. El entrenador me apoyó y yo se lo he dicho personalmente, pero yo le he correspondido de la misma manera. El año pasado contaba menos con Pablo y yo jugué por la derecha, por la izquierda, de delantero En un partido de Copa del Rey, jugué cuando venía de un esguince de tobillo. Esa confianza me la ha dado porque me la he ganado. Pero es cierto que me ha apoyado siempre y se lo he agradecido cuando hablamos.

¿Cree que Emery entiende que usted se enfade por no estar contando tanto?

Él sabe que lo que quiero es jugar y si me enfado es porque no lo hago y me cabreo conmigo mismo porque tengo menos minutos que otro. Venía de jugar mucho y no estoy acostumbrado a estar en el banquillo y eso me fastidia.