Representantes del Rayo Vallecano y del Real Betis, que se enfrentaron el pasado domingo en la sexta jornada de la Segunda división, ya se han puesto en contacto con el niño herido por una pedrada en la cabeza, en los prolegómenos del encuentro.

El menor, de 11 años, recibió una pedrada en la parte superior derecha de la frente, que precisó tres puntos de sutura, cuando se encontraba con su padre y acudían a presenciar el Rayo Vallecano-Real Betis (2-2).

El niño es seguidor del Atlético de Madrid pero se hizo abonado del Rayo Vallecano, junto a su padre, para poder ver partidos en el estadio ante una campaña de precios bajos de este club.

"Íbamos por la calle, camino del estadio y con dos amigos y otro menor, a comprarnos unos bollos, cuando vimos que se estaban peleado y lanzando objetos miembros de las dos aficiones. Salimos corriendo para evitar vernos inmersos en la pelea, pero de pronto vi como mi hijo caía al suelo tras recibir una pedrada en la cabeza, que le hizo brotar sangre", dijo a EFE el padre del niño, José Francisco Rodríguez Tapia.

El padre, al ver al niño en el suelo y con sangre en la cabeza, rápidamente acudió a un vehículo policial que se encontraba en las cercanías, que inmediatamente solicitó la intervención del SAMUR (Servicio de Asistencia Médica Urgente).

Tras llegar una ambulancia del SAMUR, y ser atendido, el niño fue trasladado al hospital Gregorio Marañón, donde fue sometido a pruebas radiológicas y se le aplicaron tres puntos de sutura. Después, el menor fue dado de alta y llevado a su hogar; aunque por precaución el lunes no acudió al colegio, donde sí ha ido este martes.

"Debo agradecer cómo se han volcado con nosotros tanto el Rayo como el Betis y las peñas de uno y otro equipo. Se han puesto en contacto con nosotros, se han interesado por la salud de mi hijo y le han dicho que desean entregarle algún regalo e, incluso, invitarle a partidos", apuntó el padre del menor.