Liga BBVA | Atlético
Maxi salva a Abel, pero aún espera su renovación
Maxi renunció a la capitanía tras sus desplantes de la temporada pasada. La relación entre él y Abel ha sido tensa en algunos momentos, pero en Mestalla el argentino dio la cara por su técnico y le alejó de la guillotina. Mientras, el futbolista aún no sabe con certeza cuál será su futuro.
Maxi le salvó la cabeza a Abel en Mestalla y está a la espera de que el club mueva definitivamente ficha para renovarle. La Fiera consiguió en el minuto 92 que la corbata le llegara al cuello a su técnico con el que, todo sea dicho, no es precisamente uña y carne. A la salida de Mestalla, el jugador argentino mantuvo una reunión con sus agentes por espacio de 20 minutos.
El Atlético, una vez cerrada la continuidad de Forlán, tiene avanzadas ya otras ampliaciones y la del ex capitán está entre esos planes. Hay que recordar que el compromiso de Maxi con el Atlétio expira al final de la presente campaña y que a partir del mes de enero será libre para negociar con quien quiera. Su situación es exactamente igual a la que vivió Leo Franco durante el pasado ejercicio y el portero al final acabó desestimando la oferta rojiblanca por considerarla tardía e insuficiente. Después el Atlético tuvo que fichar a Roberto de manera apresurada.
Relación. Pese a los roces del pasado con su técnico y a comenzar en Mestalla el partido desde el banquillo, La Fiera saltó al campo con un espíritu batallador que al final le valió a su equipo un punto. Primero le dejó una pelota franca a Cléber Santana al borde del área, pero el brasileño la reventó fuera. Después fue el propio Maxi quien tuvo el empate en sus botas por dos veces, pero a la tercera no perdonó. Abel acertó esta vez con los cambios y tanto Maxi como Reyes aportaron. Y eso que la situación personal de ambos había llevado a algunos a pensar que no meterían la pierna por su técnico. A Abel le salvó el puesto Maxi, pero habrá que ver si en Oporto el argentino vuelve al once.
Pisó seis veces el área rival
Maxi revolucionó el partido en Mestalla y, si bien no resultó muy efectivo en la circulación de balón, sí que el equipo ganó mucho en llegada. En los 33 minutos que el jugador argentino estuvo en el campo acumuló 2 disparos a portería con un acierto del 50 por ciento. Además, se empleó de manera incisiva por su banda y el centrocampista argentino pisó hasta en seis ocasiones el área rival. Dos de sus cuatro centros estuvieron cerca de convertirse en gol si Cléber o Reyes hubieran acertado.