Sigue la gafancia grana; en el último segundo le empataron

Qué injusto puede llegar a ser el fútbol!... El Murcia, que había firmado el mejor partido de todo el año, que había encontrado a la mejor versión de Chando (espectacular su segundo gol), que fue capaz de 'revivir' aún a pesar de todo el empeño que en contra opuso el árbitro andaluz, Melero López, que se había dejado hasta la última gota convencido de que ante el Salamanca debía e iba a llegar la primera victoria del curso, recibió en la última jugada del 'alargue' un gol (pésimamente defendido, por cierto) con aroma a tiro a bocajarro, a 'cornada' de esas que conducen a la UVI; en realidad el lugar en el que se halla el equipo de Campos después de disputadas cinco jornadas.

Un empate que sabe a rayos, que puede tener unos efectos a la larga de pronóstico reservado y que, se quiera o no, tensa un poco más la soga de este Murcia que es algo más que un 'pupas', sobre el que pesa una maldición implacable y casi eterna, que convierte a su afición en un pueblo en permanente luto. A pesar de que el tanto del central Goikoetxea deje ya todo sin sentido, es justo contar que el Murcia salió decidió a ganar y que por momentos se comió a un Salamanca muy justito. Luque parece que contagió de seguridad a sus compañeros y de sus botas salieron las primeras acciones de peligro. Los grana, con un fútbol rápido y vivaracho, con Pedro y De Coz (estuvo enorme) ganando la línea de fondo, animaban el cotarro y transmitían una sensación de superioridad, que, eso sí, no se traducía en remates claros. Era más un dominio (producto de una presión 'a toda cancha' tremenda y de los fallos del rival) que un carrusel de ocasiones, pero el Murcia era claramente mejor. En la última jugada antes del descanso Pedro, De Coz y Chando fabricaron un gol que sonó a conquista definitiva... pero no. Ahí estaba el árbitro para complicar la vida. Un mal despeje de Bea, el empujón sobre un Elía que debió ser más expeditivo (luego tuvo una mano providencial) y el empate... qué parecía superado hasta que llegó el tiro de gracia. Entre medias mil oportunidades (Pedro tuvo una que no se puede fallar y otro al palo)... Y de nuevo, el berrinche. Muy duro.

Oliva "Partido bonito, sin ocasiones"

"No voy a mentir si no dijera que no me esperaba el empate. Ellos han sido superiores pero nosotros también hemos tenido nuestras oportunidades, sobre todo ésa en la que Elía ha metido la mano y ha salvado el empate antes de que llegara".

Campos "El equipo sigue creciendo"

"No quiero hablar de los árbitros pero lo de hoy ha sido demasiado. Aún así me quedo con que el equipo va creciendo poco a poco y hoy ya hicimos más ocasiones que en los últimos partidos. Es una pena que siga sin llegar esa victoria".