Weligton: "Somos una familia y Muñiz es como nuestro padre"

Weligton Robson Pena de Oliveira (26-8-1979, Fernandópolis, Brasil) inicia su tercera campaña en Málaga y como el dice: "Apenas he vivido momentos malos en este tiempo. Sólo un mes, el del arranque de la temporada pasada". Sus mayores éxitos como futbolista van ligados a los más recientes del Málaga. Un camino juntos que espera que siga siendo tan exitoso: "Pero nunca se nos puede olvidar ir paso a paso. Esa es la fórmula de nuestro éxito y no hay que cambiarla. El partido más importante de la temporada es ante el Deportivo porque es el siguiente".

Ahora Weligton es un veterano, uno de los capitanes albicelestes. El defensa habla de sus sensaciones cuando apenas se lleva un partido de Liga: "Los nuevos se están adaptando bien. Ellos no conocían a Muñiz, que nos exige para sacar lo mejor de nosotros mismos. Le gusta controlarlo todo y saber lo que pasa. En el Málaga somos como una familia y él es un padre para nosotros. Y un padre siempre quiere lo mejor para sus hijos". La armonía es una de las principales características de este Málaga. Ese ambiente también está marcado por el aire fresco que traen los nuevos y los jóvenes. "Se está hablando mucho de Forestieri y es normal porque es un buen jugador y muy joven. Pero a mí me han sorprendido mucho los chicos del filial que están con nosotros. Edu (Ramos), David (González), Portillo... Tienen el perfil de jugadores de Primera División. Ojalá triunfen", aseguró Weligton absolutamente convencido. Además, el brasileño habla maravillas de los nuevos. Stepanov, Mtiliga, Edinho... Sobre todo destaca cualidades humanas. Aunque de todas las incorporaciones, el gran desconocido y una de las grandes esperanzas es Obinna. Por lo poco que le ha visto, Weligton cree que tiene maneras: "Me recuerda en algunas cosas a Etoo. Este año tiene que ayudarnos mucho".

Weligton se perdió el primer partido por sanción, sin embargo... "disfruté más que mis compañeros de la fiesta que se vivió porque estuve en la grada. Espero que la afición esté también ahí en los momentos malos, que los habrá. De todas formas, ya tengo ganas de jugar, pero eso dependerá de lo que decida Muñiz. Si cree que debo hacerlo encantado, si no, ahí saldrá algún compañero que lo hará igual de bien". El central tiene ganas de jugar en Riazor, donde jugaron ídolos de su país: "Allí en Brasil se sigue a ese equipo desde el Superdepor por Bebeto, Mauro Silva... y luego por Djalminha. Ahora hay gente como Filipe y Zé Castro, a los que conozco pero poco. A quien sí conozco es a Adrián. Es un gran amigo y hablamos mucho, nos cachondeamos el uno del otro. Pero en el campo cada uno hará lo suyo. Intentaré pararle con juego limpio, si no, igual lo hago a patadas. Bueno, si juego". Todo dicho con un tono de broma, por supuesto. Bromas no habrá, en cambio, el domingo: "Sabemos que es complicado. Riazor y su gente aprietan. Lo daremos todo".