"Claudio siempre me ha tratado como uno más"

Javi Lara debutó con una nota muy alta. El centrocampista, tras jugar los 120 minutos que duró la eliminatoria ante el Cartagena a un nivel destacado, ya se siente uno más del grupo. Después del culebrón que generó su contratación, aconsejada Juan Carlos Ramírez, el futbolista ha hecho de su calidad y humildad su mejor aval para ganarse la confianza de Claudio. "Claudio siempre me ha tratado como uno más", confesó. Sobre la derrota de Cartagena, el cordobés reconoció ayer que "de nada sirve haber jugador bien o mal si no ganamos". "Si a los de fuera dicen que se les ha quedado cara de tontos, imagínate a los que jugamos el partido; más aún", insistió. Pero al margen de eso, su rendimiento ya no da lugar a dudas, pese a haber llegado de Tercera: "Mi papel en el equipo es trabajar día a día para que luego el entrenador tome las decisiones", dijo.

Claudio cuenta con él para el puesto de mediocentro y no tanto en banda derecha, su posición natural: "En la posición que me pongan siempre lo intento hacer lo mejor posible. Claudio me está usando como mediocentro por el desplazamiento de balón que tengo. Los compañeros se mueven mucho de mediocampo hacia delante y eso siempre te da facilidades".

Estuvo aislado de la polémica por su fichaje

La contratación de Javi Lara estuvo rodeada por la polémica. Juan Carlos Ramírez puso su nombre sobre la mesa tras ver el gran partido que hizo contra La Nucía en la fase de ascenso a Tercera con el Alcalá. El consejero delegado le ordenó a su director deportivo, Jesús de Huerta, que fuese a ver el encuentro de vuelta y tras su informe favorable decidieron apostar por él, pese a que Claudio no había dado su visto bueno. Al joven centrocampista esta situación no le afectó y pasó de la polémica para dedicarse a trabajar y demostrar sus cualidades: "Estuve totalmente aislado de eso porque no le presté mucha atención. Gracias a los compañeros estoy muy contento aquí". Y reconoció que tenía mucho que ganar y muy poco que perder en esta aventura: "Si no convencía, me iba a ir cedido a un equipo de Segunda B, que era lo que ya tenía". "Por eso, estuve siempre tranquilo. Por mi forma de ser, soy un chaval abierto y optimista. Hablé con el míster el primer día y me adapté desde el primer momento al vestuario", finalizó.