El Real Valladolid se impuso por 1-3 al Rayo Vallecano en un Teresa Rivero con poco público, durante el partido amistoso con el que el conjunto madrileño efectuó la presentación para la temporada 2009-10 ante su afición.

Ambos equipos necesitaban una victoria para forjarse una salida airosa de la pretemporada. Le urgía al Rayo, que necesitaba afirmarse ante su afición después de las tres derrotas, los dos empates y las dos victorias que acumula este verano, pero también al Valladolid, que acudió al feudo vallecano con un balance de cinco derrotas de nueve encuentros.

Tras unos momentos iniciales de despiste, en los que a ambos equipos les costó ubicarse, llegaron las primeras ocasiones de gol por parte del Valladolid, que se vio detenido por un acertado Cobeño, en especial cuando éste detuvo el lanzamiento que Baraja realizó con la cabeza en el minuto 6.

Los locales reaccionaron entonces fortaleciendo su portería y fue Quero quien, en la mitad del primer tiempo, inauguró el marcador del Rayo, enmendando así el fallo que Piti había cometido pocos minutos antes, cuando desvió por encima de la portería de Justo Villar una ocasión clara de gol.

Pero el Valladolid regresó del descanso pisando fuerte y le dio la vuelta al partido, como evidencian los goles que firmaron Sesma y Borja en un intervalo de apenas cinco minutos, fruto de la intensa ofensiva que realizaron los de Mendilibar, que prácticamente cercaron la portería de Cobeño.

De poco sirvieron los numerosos cambios que Pepe Mel (Míchel, Collantes, Susaeta, Reyes) hizo en su formación, porque en el minuto 82 Bueno selló el 1-3 con el que se saldó el encuentro, que finalizó con la entrega del trofeo 'Teresa Rivero' por parte de la presidenta 'rayista' al equipo invitado.