Kaká y Robben golean al Dortmund

Amistoso | B. Dortmund 0 - Real Madrid 5

Kaká y Robben golean al Dortmund

Kaká y Robben golean al Dortmund

REUTERS

El brasileño volvió a ser el mejor de un Real Madrid que ofreció una primera parte discreta y arrolló al Dortmund en la segunda. Robben revolució el partido tras el descanso. Anotó el golazo de la noche y participó en otros dos. Raúl fue suplente.

El Real Madrid ha reunido a algunos de los mejores jugadores del mundo, deslumbra tanta estrella, pero de momento le falta para ser un equipo que asuste. Es normal, no hay que alarmarse. Hay demasiados cambios como para pretender que no surjan inconvenientes en el camino. Las piezas terminarán por encajar, pero no sin trabajo y dificultad. Esta nueva obra exigirá dedicación y esfuerzo por parte de Manuel Pellegrini y sus jugadores. La primera parte alentó el desánimo, la segunda dibujó una sonrisa en el madridismo.

El camino parece el correcto y a las dudas que nacen de la falta de continuidad en el juego y de la dificultad para combinar y mezclar tanto talento se contraponen destellos de calidad de hombres como Kaká, Granero y Robben. Un fichaje estrella, un repescado a última hora y un descartado. La incapacidad para dar salida a algunos jugadores y para fichar a otros tiene en ocasiones benditas consecuencias para los equipos. Por eso, el Madrid se ha encontrado con dos futbolistas que no figuraban en el dibujo inicial de la plantilla: Granero y Robben.

El primero abrió el marcador después de una genialidad de Kaká, que con un taconazo dejó al Pirata solo ante Weidenfeller, al que batió con la tranquilidad y la habilidad que sólo tienen los buenos. El holandés firmó el segundo tanto, un golazo de volea con la izquierda desde fuera del área. El balón salió despejado del área en el saque de un córner y Robben lo devolvió convertido en un obús.

Participó también en el tercero, convertido por Higuaín a pase de Robben después de una gran jugada llevada por Kaká desde el centro del campo, y en el cuarto, un penalti cometido sobre el propio Robben y que fue convertido por el brasileño.

Como decíamos, a falta de que la maquinaria esté ajustada nadie brilla más que Kaká, un jugador excepcional, fútbol en su estado más puro. Conduce el balón con clase y elegancia, siempre con la cabeza alta para situar a sus compañeros sobre el campo y ya cerca del área tiene la virtud de elegir siempre bien: un tiro si hay espacio o un pase si un compañero está mejor situado. No sabe lo que significa la palabra egoísmo. Por su capacidad para generar juego, ningún fichaje será tan bueno para el Madrid como el suyo.

Lo mismo ocurre con Granero, al que le sobra calidad para estar cada jornada entre los once elegidos por Pellegrini. Se asocia con naturalidad con Kaká y también con Benzema y Cristiano, muy flojos esta vez, siempre suma y pocas veces resta. En esta prueba que pareció seria, por como se lo tomó el técnico chileno más que por el rival, Granero fue titular y fue Raúl el que se quedó en el banquillo. Quizá sólo sea una anécdota. O quizá no. El avance del curso nos descubrirá la verdad. Raúl, de momento, se lo toma con calma y aprovechó los minutos que jugó para firmar el quinto de Madrid. Así es el capitán.

Más sorprendente fue la alienación de Pepe como mediocentro, experimento que tanto le gusta al seleccionador de Portugal, Carlos Queiroz, lo que ya nos hace desconfiar de la prueba. No es la primera vez que Pellegrini emplea a Pepe en esa posición y parece más que probable que lo veamos ahí durante la temporada.

Este movimiento táctico de Pellegrini desplazó a Lass hasta el lateral derecho, donde estuvo perfecto y complementó su incansable trabajo en defensa con incorporaciones por la banda. Nunca defrauda el francés. Completaron la zaga Albiol, Metzelder y Marcelo, que recuperó el sitio que hasta ahora algunos creían que era de Drenthe. El holandés apenas dispuso de unos minutos al final, como Garay. La aparición de ambos no pasó de anecdótica.

Prueba del interés que le puso Pellegrini al amistoso fue que sólo hizo un cambio en el descanso, Robben por Granero, mientras que el técnico alemán, Jürgen Klopp, efectuó nueve. Para el Dortmund el partido era una fiesta, para el Madrid una oportunidad para afinar su puesta a punto.

Robben revolucionó el partido, como ya ha quedado apuntado y a la fiesta quiso sumarse Raúl, que entró en el tramo final del choque por Kaká. Firmó el quinto para cerrar un partido que acabó con susto por un golpe que recibió Xabi Alonso en la rodilla. Desde el silencio, Xabi estuvo brillante. Así es él. Deja el protagonismo a otros, pero su aportación resulta indispensable para que todo funcione.