Espanyol | Tragedia en el club perico
El Espanyol vive su domingo más negro
Gran conmoción por Jarque, cuyo cadáver será repatriado hoy
Los restos mortales de Dani Jarque, capitán del Espanyol fallecido el sábado en Florencia a causa de una asistolia, llegarán esta tarde-noche a Barcelona de no mediar complicación en los trámites de repatriación. La idea del club, de común acuerdo con la familia, es instalar mañana martes la capilla ardiente en el antepalco del estadio de Cornellà-El Prat para que la afición rinda su último homenaje al que fue y será por siempre uno de sus ídolos. El acto del sepelio se celebraría el miércoles en Sant Boi de Llobregat, pero este extremo no ha sido confirmado.
A lo largo del día de ayer se sucedieron las conversaciones al más alto nivel entre las autoridades españolas e italianas para agilizar la realización de la autopsia, primero (se practicará hoy a las 9:00), y de la repatriación del cadáver, después. En su condición de presidente de la Comisión de Exteriores del Congreso, y persona muy cercana al Espanyol y a la familia Sánchez Llibre, el líder de Unió Democràtica, Josep Antoni Duran i Lleida, resultó pieza clave en estos contactos en los que intervinieron los ministros Miguel Ángel Moratinos (Exteriores) y Francisco Caamaño (Justicia). El Gobierno italiano se mostró muy receptivo a su deseo de abreviar en la medida de lo posible todos los trámites.
Daniel Sánchez Llibre, presidente del club, y Germán de la Cruz, consejero responsable del área deportiva, viajarán hoy a Florencia para recoger el cadáver del futbolista y acompañarlo hasta Barcelona. Ambos, el consejero Ramon Condal y los técnicos Mauricio Pochettino y Feliciano di Blasi visitaron ayer a media tarde a la familia del jugador en su domicilio del Castelldefels: Jessica, su pareja, sus padres y demás familia. "Ninguno tenía palabras que decir ante esta tragedia, nos pusimos a su disposición, nos abrazamos y rompimos a llorar", dijo el presidente.
Volvió el equipo.
Técnicos y jugadores habían regresado a Barcelona pasada la una de la tarde y se dirigieron al estadio, donde los españolistas concentrados les tributaron una cerrada ovación. Ninguno tuvo valor de poner pie a tierra. Bajaron del autocar que les trasladó desde el aeropuerto, recogieron sus coches y se fueron a sus casas entre una infinita tristeza. En Florencia se quedaron el médico del club, Miguel Cervera, el delegado José María Calzón, el director deportivo Ramon Planes y su ayudante, el ex jugador Urbano Ortega. El equipo no volverá al trabajo al menos hasta el viernes.
La puerta 21 del nuevo estadio (el número del dorsal de Jarque, que será retirado por el club) fue el punto de encuentro de muchísimos aficionados españolistas que se fueron acercando para homenajear al jugador desaparecido y buscar consuelo entre correligionarios futbolísticos. Pancartas, velas, fotografías, camisetas del Espanyol... fueron llenando entre lágrimas y expresiones de incredulidad por el suceso el amplio vestíbulo del estadio al que se accede por esa ya tristemente famosa puerta 21. Todos coincidieron en un mismo deseo y clamor: que el estadio lleve el nombre de Dani Jarque.
A las nueve de la noche tuvo lugar una concentración multitudinaria de aficionados a la que se sumaron seguidores de otros equipos españoles y que supuso el punto final al domingo más negro de la historia blanquiazul. Especialmente emotiva fue la presencia de un grupo de aficionados sevillistas con el recuerdo de Antonio Puerta presente en el ánimo de todos. Todas las televisiones y radios mantuvieron conexiones en directo a lo largo del día con este punto del estadio, pues la muerte de Jarque fue asunto de portada de todos los informativos.
El mundo del fútbol fue desgranando pésames y lamentos durante toda la jornada de ayer. El dolor se extendió a otros deportistas que manifestaron su pesar por la muerte de Dani Jarque. Entre ellos los hermanos Pau y Marc Gasol, españolistas de cuna por influencia de su abuelo, y como Jarque, naturales de Sant Boi de Llobregat.