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Liga BBVA | Valencia

Los millones del Guaje saldrán del nuevo estadio

El presidente ché ideó un plan para mantener a su jugador franquicia en la plantilla, pese al gasto que eso le supone a un club con muchos problemas económicos, con la construcción de la nueva casa del Valencia de fondo.

Miguel Á. Vara
<b>CLAVE. </b>El abaratamiento en las obras del nuevo campo permitirá retener al Guaje en la plantilla.

Aunque para muchos fuera difícilmente explicable que un club con graves problemas económicos no vendiese a David Villa, las cuentas le salen a Manuel Llorente, que supo retener al Guaje y no como capricho sino con argumentos y sin que las arcas del Valencia se resintieran. ¿Cómo? Haciendo números y recortando de otro sitio el dinero que se iba a dejar de ingresar por el Guaje. Y ese filón es el nuevo estadio, auténtico problema para la economía ché. Por eso, el presidente encargó a los arquitectos que revisen todos los gastos, que afinen cada euro y que se renegocien muchas cantidades, además de eliminar elementos que encarecían la obra. Con esto, la entidad dejará de pagar cantidades muy importantes, parecidas a las que se iban a percibir por el traspaso de Villa.

De entrada, de los 42 millones de euros que como máximo ofrecieron por el asturiano, al Valencia le iban a quedar unos 24, pues lo previsto era invertir al menos 18 en un sustituto de garantías. ¿Por 24 millones era un buen negocio prescindir de Villa? No, concluyó Llorente, que centró sus esfuerzos en sacar esa cantidad del nuevo estadio. De inicio, alargó los plazos, pues los costes se disparaban si la constructora tenía que acabar la obra a toda prisa. Ya sin prisa, el precio disminuye, además de que lo que se venía pagando al contado se negocia ahora hacerlo a plazos. Ahí el Valencia tiene la sartén por el mango pues, si no es así, las obras no se retomarán y eso no le interesa a la constructora, que preferirá cobrar a plazos antes que no hacerlo.

Más ahorro llegará abaratando materiales, pues en el diseño del estadio se había disparado con pólvora de rey. Además, los precios se establecieron hace tres años, pero con la crisis actual se quiere renegociar la cuantía de los materiales o adquirirlos de otros mercados más económicos, máxime ahora que hay excedentes por la recesión. Todo lo que haga falta para ahorrar y cubrir la continuidad de Villa.

Habrá recortes en varios 'lujos' previstos

Se ha estudiado minuciosamente cada sector y se consideran innecesarios ciertos excesos del tipo de una sala de prensa para 500 personas, con traducción simultánea en varios idiomas, o un palco VIP desproporcionado y con materiales de lujo. En todos esos aspectos se va a bajar un escalón, o dos, con un sensible ahorro en el coste final de la obra. El mensaje transmitido a los arquitectos es que presenten un plan para acabar el estadio en varias fases, una primera que permita jugar ya en él, pero sin elementos que lo encarezcan como la cubierta prevista, y que el precio no se dispare. Después, cuando el club vuelva a respirar, ya se acometerían el resto de mejoras. Con ese plan, el Valencia se ahorraría muchos millones de euros, tantos que convirtieron el posible traspaso de Villa en algo innecesario, pues ese beneficio se logrará de abaratar un estadio presupuestado por todo lo alto, algo que los chés no se pueden permitir ni de lejos.