El hombre agredido por Gerrard asegura que recibió un "aluvión" de golpes

Marcus McGee, de 34 años, perdió la corona de un diente frontal en el ataque que tuvo lugar la madrugada del 29 de diciembre del año pasado, según declaró la víctima al Tribunal Estatal de Liverpool. McGee, quien inicialmente fue atacado por uno de los amigos de Gerrard, dijo que pensó que el capitán del Liverpool, de 29 años, le había suministrado el primer golpe, según informó la Asociación de Prensa Británica.

"Recuerdo un aluvión de golpes de puño viniendo hacia mi cara, pero no sabía quién los estaba dando. Después de ver la grabación de las cámaras de seguridad del local fue obvio que Steven Gerrard me golpeó un par de veces, tal vez tres, pero sinceramente no podría decirlo aquella noche. No sabía quién lo había hecho", explicó.

McGee, quien estaba a cargo de la música en el club nocturno Lounge Bar, ubicado en Southport, cerca de Liverpool, sostuvo que él se había negado a permitir que Gerrard tomara el control de un reproductor de CD's. El mediocampista de la selección inglesa luego retornó cuando McGee estaba sentado solo en el bar y lo insultó. "En mi declaración no recordé esta conversación, pero viendo los movimientos de mis manos seguramente le estaba preguntando cómo reaccionaría si alguien viene y le saca algo suyo de una manera bastante ruda", indicó McGee al tribunal.

Ayer, el tribunal vio una grabación de cámaras de seguridad en la que se veía a Gerrard hablando con McGee antes de que uno de los otros imputados golpeara con el codo al empleado. La fiscalía del caso dijo que Gerrard golpeó a la víctima con el "estilo y la velocidad de un boxeador profesional".

El jurado también escuchó que el jugador admitió haber golpeado a McGee, aunque aclarando que había actuado en defensa propia, sin saber que el empleado ya había sido golpeado. "No lancé ningún golpe, no estaba actuando agresivamente, no golpeé a nadie", aseveró hoy McGee. Gerrard fue arrestado aquella noche y se declaró inocente, mientras el resto de imputados ya se declararon culpables de haber estado involucrados en la pelea.