Internacional | Italia
Felipe Melo ya es jugador de la Juventus a falta de la firma
El centrocampista brasileño Felipe Melo no oculta que, aunque no es oficial aún, la próxima temporada jugará con el Juventus de Turín, equipo en el que, si está libre, quiere llevar el número 88 en su espalda.
Así lo explica el futbolista en una entrevista que publica hoy el diario deportivo italiano "La Gazzetta dello Sport", en la que el brasileño no tiene reparos en reconocer que se vestirá de "blanquinegro" en cuestión de días, a pesar de haber renovado el pasado 30 de junio por cuatro temporadas más con el Fiorentina.
"Tenemos que trabajar para llevar al Juventus al primer puesto. Yo, si no gano, me enfado", confiesa el centrocampista, quien explica que se siente "emocionado" por el interés que ya han mostrado los aficionados del club turinés ante su próxima llegada.
Melo pasa estos días los reconocimientos médicos del Juventus, antes de que se haga oficial su fichaje por el club italiano, cuyo consejero delegado, Jean Claude Blanc, y director deportivo, Alessio Secco, han asegurado que su llegada puede ser determinante para ganar todos los títulos posibles.
"Les doy las gracias a Blanc y a Secco, a todos los que han querido mi fichaje. No veo la hora de comenzar. Pero con el trabajo, este equipo puede ganarlo todo", comenta el brasileño.
"Liga y Liga de Campeones. En el Juventus se puede ganar todo. Pero para hacerlo hace falta trabajar", añade.
Melo, quien confiesa ser "un hombre feliz", no se olvida de sus antiguos seguidores, los del Fiorentina, para los que también tiene unas palabras.
"Les quiero dar las gracias por lo que me han regalado. Los llevaré siempre en mi corazón. Lo siento. Entiendo que alguno, probablemente muchos, ahora la tomen conmigo. Pero ha sido así. Ha sido bueno también para el club. El Fiorentina ha recibido mucho dinero y ahora podrá reinvertirlo. Lo hará bien, como siempre", incide.
Con la selección de Brasil, Felipe Melo, de 25 años, quiere ganar el Mundial de 2010 en Suráfrica, pero poco a poco: "Nosotros los brasileños sabemos que sin sacrificios no se llega a ninguna parte", dice.