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Liga BBVA | Racing de Santander

El Hércules avisa a Mandiá que no interfiera sus fichajes

Sus accionistas hacen cuestión personal atar a Aguilar.

<b> ROCE. </b>El fichaje de Aguilar, propiedad del Udinese, puede ser caliente.
agencia

Lo tardía y tempestuosa salida de Carlos Mandiá del Hércules parece que va a acabar generando un inesperado enemigo del Racing, al menos a la hora de cerrar fichajes para el próximo ejercicio. Los dirigentes alicantinos ya han advertido que considerarán 'Casus belli' cualquier injerencia racinguista en las negociaciones que mantiene con futbolistas para incorporarlos a su plantilla.

El encargado de proponer y negociar las contrataciones era Mandiá que, aunque en Santander no ostentará el cargo de director deportivo, ya ha comenzado a trabajar en la configuración de la plantilla del Racing para la próxima Liga. Dado que el mercado al que pueden acudir ambos clubes es similar y que, lógicamente, el lucense será consecuente con los jugadores que le gustan y los que no, los roces están asegurados.

Abel Aguilar.

Vicente Botella, presidente, y Enrique Ortiz, máximo accionista, ya han detectado que el Racing se ha interesado por el colombiano Abel Aguilar (propiedad del Udinese) y han puesto el grito en el cielo. A su círculo cercano han asegurado que: "ya le dijimos a Mandiá que no se metiera por medio y, sin embargo, le ha llamado. Que se vaya olvidando, tenemos más dinero que ellos y vamos a poner sobre la mesa el que haga falta en este caso".

En Alicante se especula, incluso, con que Ortiz y Botella están preparando una ofensiva, oferta mareante incluida, por el alicantino Toño de cara a firmarlo (gratis), a partir del 1 de enero, para la próxima temporada. O a encarecer su renovación en el Racing, por lo menos.

Amigos, pero la vaca por lo que vale

La amistad en el fútbol existe..., pero hasta un punto. Se cuida siempre y cuando no perjudique tu carrera profesional. En el Racing de las últimas temporadas hay sobradas muestras de ello. Hace justo un año, lo primero que pidió Muñiz, íntimo amigo del presidente del Málaga, Fernando Sanz, fue que Pernía lograra quitarle a su antiguo club el defensa central Welligton. No pudo hacerlo, pero, a pesar de la amistad, lo intentó. Hoy se alegrará del fracaso.Mes y medio más tarde, el 31 de agosto, Marcelino, idolatrado en Santander y con magníficas relaciones personales en el Racing, intentó y consiguió llevarse a Jorge López en lo que fue la peor operación racinguista en años: ni lo suplió ni, hasta ahora, lo cobró.