Un grupo considerable de clubes de Segunda División B, entre los que se encuentran históricos como Compostela, Racing de Ferrol, Oviedo y posiblemente también el Sant Andreu, quieren plantear a la FEF una reestructuración de la Segunda División que implique su ampliación a dos grupos, norte y sur. No obstante, según reconoció el vicepresidente del Oviedo, Alberto González, "es muy posible que al próximo pleno, por razones de tiempo, la demanda sólo se pueda incorporar al apartado de ruegos y preguntas para, con posterioridad, convocar una asamblea extraordinaria en la que se debatiese esta demanda".

José María Caneda, presidente del Compostela, manifestó que "una mayoría de los clubes de Segunda B, alrededor de 42, apoyan la reestructuración". Una corriente importante sostiene que se incluya el criterio de viabilidad económica para la selección de los clubes. Por su parte, fuentes de la LFP manifestaron que la ampliación necesita el visto bueno de esta entidad y es prácticamente imposible que se realice.