Liga BBVA | Tenerife
'El Larguero' vuelve a enamorar en Tenerife
De la Morena y su equipo brindaron una noche mágica al son de Los Sabandeños.
La voz inconfundible de José Ramón de la Morena, un guión blanquiazul y la complicidad de un público entregado sazonaron una edición de El Larguero que tardarán en olvidar los oyentes tinerfeños de la SER. Empezó la función con palabras de gratitud y buenos deseos. Gratitud porque es especial la isla del Teide para este programa líder; buenos deseos porque los tiene España entera para un Tenerife recién ascendido. "Prometí que vendría en cuanto subiérais, y aquí estoy", dijo De la Morena. "Procuro cumplir", sentenció, aplaudido.
Para entonces ya estaba enloquecido el aforo de un recinto que se quedó pequeño ante el regreso de El Larguero cuando aún resonaban los ecos de su última visita. Fue en los tiempos de la UEFA y entonces, como ahora, estuvieron Los Sabandeños.
Puso su música nostálgica esa huella guanche necesaria en una noche con aroma canario, de principio a fin. Desde los saludos de Lama desde Sudáfrica a la canela fina que trajo Trueba, digno colofón a un larguero de sensaciones. De la alegría por el ascenso a la tristeza por la radiografía humana a Cristo Marrero, del optimismo de Oltra a la cautela de Concepción, de las gracias de Manolete a las noticias de Bustillo.
En realidad, cualquier día es bueno para traerse la función y vibrar con un público que siente este programa tan cercano, tan suyo. Pero fue todavía mejor que llegase De la Morena en este lunes de resaca dulce por un ascenso histórico.
En la misma noche donde estaba recién horneada la renovación de contrato de José Luis Oltra, en la misma jornada donde estaba cocinado el título de artillero de oro para el delantero Nino, en el mismo día donde acababa de colgarse para siempre la blanquiazul del capitán Cristo Marrero.