Liga BBVA | Villarreal
Se marca el 13 de julio como fecha tope para fichar
La entidad amarilla trabaja sin prisa, pero a la vez sin pausa, para intentar cerrar los refuerzos que necesita para encarar esta próxima temporada. Algo que quiere terminar de hacer en las tres próximas semanas. Es, sin duda alguna, el alma mater de la cantera amarilla. No en vano su llegada al club hace más de diez años fue para comenzar este proyecto y hoy vive con ilusión un ascenso a Segunda que confirma el trabajo bien hecho.
El Villarreal espera cerrar antes del inicio de la pretemporada este próximo 13 de julio las incorporaciones que necesita para la temporada 2009-10. Además, en el capítulo de salidas, sólo se producirían en el mes de julio, ya que entrando en agosto, la marcha de algún futbolista tan sólo sería posible abonando la cláusula de rescisión. El club está moviéndose en el mercado y lo está realizando desde hace mucho tiempo. Aunque la sensación es de estar las cosas bastantes paradas, algo que sorprende a la mayoría de aficionados, ni mucho menos es así.
A día de hoy, la entidad que preside Fernando Roig tiene marcada una hoja de ruta tanto para las llegadas como para las salidas. Así, las negociaciones en ambos sentidos tienen una fecha límite en las que se deben realizar. De esta forma, el club sigue moviéndose en los parámetros marcados hace unos meses para reforzar la plantilla.
Y es que desde el mismo Villarreal se reconocen negociaciones abiertas por dos o tres jugadores por los que tan sólo faltaría que los clubes con los que se negocia acepten estas ofertas. Una dilación que en el club ven lógica y normal a estas alturas y que cambiará tras la Copa Confederaciones. Una fecha en la que se espera desde la cúpula amarilla comience el movimiento.
Tanto es así que el mismo José Manuel Llaneza aseguraba que estas tres próximas semanas pueden ser claves: "En estos momentos nos manejamos en un mercado complicado y que está a la espera de la mejor oferta. Una situación que empezará a moverse tras esta Copa Confederaciones y, a partir de ahí, pueden empezar los movimientos. Nuestra idea pasa por ir cerrando las cosas pronto y sería bueno tener las cosas claras antes de que comience la pretemporada".
Salidas.
En el capítulo de salidas las cosas no están tan claras, ya que se depende más del interés por parte de otros clubes que del mismo Villarreal. Desde la entidad castellonense se asegura que se escucharán las propuestas que puedan llegar, como se está haciendo con la de Matías Fernández. Pero las posibles salidas dependerán de que estas ofertas sean buenas para las tres partes implicadas y, sobre todo, de la capacidad de reacción que se pueda tener.
Y es que lo que no quiere el Villarreal es que estas salidas se produzcan ya cuando el equipo esté preparando la competición. Una situación que se pretende evitar a toda costa, por lo que no se negociaría una salida de un jugador importante superado el mes de julio. "Cuanto más cerca estemos de agosto más difícil y complicada será la salida de un jugador. Eso es algo que sí tenemos muy claro", concluyó José Manuel Llaneza.