"El Sevilla es una escuela como el Ajax"

La clásica primera pregunta. ¿Qué balance puede hacernos de esta temporada que se nos ha ido?

Creo que, con todo lo que hemos pasado, se ha cumplido con el principal objetivo que era clasificar al Sevilla para jugar la Champions, acabando terceros en una Liga que ha sido complicada. Esto es una cosa muy buena dentro del proyecto del club.

Poco antes de que terminase la Liga, usted se mojó en una entrevista: "Jiménez tiene que seguir porque se lo merece". Dicho y hecho. Mano de santo...

Es lo que pienso. ¡Se lo merece! Son los dirigentes los que tenían que decidir. Si yo tengo un jefe que me pide acabar entre los tres primeros y acabo entre los tres, yo he respetado mi contrato. El míster lo ha hecho bien.

¿Qué tiene Manolo Jiménez como entrenador?

Mucho carácter, muchas ganas, mucha voluntad. Voluntad de progresar, de escuchar y de aprender cada día con nosotros y nosotros de él. En su segundo año acabar entre los tres primeros es algo muy bueno para él.

¿Le recuerda a algún entrenador que usted haya tenido a lo largo de su carrera en Francia o incluso en el Ajax?

La verdad es que en Francia cambiaba cada año de entrenador y así era difícil empezar un proyecto a largo plazo. Después en el Ajax, con Ronald Koeman, estuve un año y medio. Es el mundo del fútbol moderno. Provoca que un entrenador tenga una presión máxima y si los resultados no son buenos, le echan. Llevamos dos años con el mismo y otros dos con el anterior, Juande Ramos. Estoy muy contento de lo que me encontrado aquí.

Tengo una curiosidad. Escudé es un apellido muy español. Muy catalán. ¿Clásico descendiente de abuelo republicano que emigró a Francia?

No. Muchas personas me lo han preguntado. Mi padre nació en Marruecos y mi madre en Francia, en Burdeos. No tengo familia española. Pero siempre me ha gustado España porque vengo del sur de Francia. Les he preguntado a mis padres y no les suena tener ningún antepasado español.

Tiene un hermano, Nicolás Escudé, que era un máquina jugando al tenis.

¡Era bueno! Ahora está retirado. Acabó dentro de los 15 mejores del mundo, ganó una Copa Davis y varios torneos. Él disfrutó de su pasión que era el tenis y yo de la mía que es el fútbol. No llegué a verle jugar la final porque yo estaba en Francia y jugaron en Australia. Dado el cambio horario me levantaba por la noche para verle jugar. Ahora es entrenador de la Selección femenina.

¿Es verdad que le quiere fichar el Inter?

Hablé con mi representante y me dijo que eso no era verdad.

<>Frase rosa de Palop: "Hay que estar loco para dejar el Sevilla estando en Champions". ¿La suscribe?

Cada uno tiene sus objetivos. Y yo tengo 29 años. He jugado la Champions aquí, en Holanda y he estado con la Selección francesa. Y he acabado tercero en la mejor Liga de Europa. Me quedan dos años de contrato. Y estoy feliz aquí.

¿Le gustaría que el presidente le ampliase el contrato por algún añito más?

No me han dicho nada.

¿Qué le parece su compatriota y compañero en el centro de la defensa Squillaci?

Está contento con su adaptación. No era fácil. En Francia lleva muchos años jugando a un alto nivel. Se ha integrado muy bien. El vestuario está contento con su juego y nosotros nos complementamos muy bien.

¿En qué se parece el Ajax al Sevilla?

El Ajax es la escuela. A mis 23 años aprendía a jugar al fútbol. Es una filosofía muy parecida a la del Sevilla, porque se cuida mucho el trabajo de cantera.

Háblenos sobre Kanouté.

Muestro mi admiración y respeto hacia el señor, la persona y el futbolista que es. Cuantos más años pasan, más crece. Gran profesional. Y un tío muy simpático y buen compañero. Para nosotros es fundamental.

¿Quién es aquí el jefe?

Antes era Javi Navarro, quien con su forma de ser nos enseñaba mucho. Daba mucha tranquilidad. Ahora Andrés Palop lo hace muy bien. Habla más que Javi y grita más que él, pero es necesario dentro del vestuario. Kanouté es más tranquilo, pero hace muy bien su trabajo.

Darío Silva nos dijo un día que su mejor amigo del Sevilla era... José María del Nido.

En toda mi carrera, Del Nido ha sido el presidente más cercano a sus jugadores. Es muy profesional. Sabe mandar en un grupo. Nos vemos siempre en el vestuario antes de los partidos y nos da ánimos a los jugadores.