Barcelona - Manchester United | El Manchester según Maldini
Del triplete del 1999 al sueño de otra Champions
La mejor temporada de la historia del United fue hace diez años, precisamente culminada en el Camp Nou ante el Bayern
Cuando Solskjaer marcó el gol del triunfo en la final de la Champions de 1999 ante el Bayern en el Camp Nou, el Manchester United coronó la mejor temporada de su historia. El dramatismo por la remontada en un partido que tenían perdido culminó el triplete tras el título de Liga y el de Copa con la victoria en la final ante el Newcastle, con goles de Sheringham y Scholes. La nueva generación conocida como los Fergie babes y con Scholes y Beckham como emblemas empezaba a dar fruto. Jamás un equipo en Inglaterra había conseguido el triplete. No bajar el nivel era desde ese momento el gran reto de Ferguson. En realidad, la exigencia era tal que se le exigía la Champions y empezó a considerar sus títulos de liga en 2000 y 2001 como algo menor, e incluso la renuncia a jugar la Copa inglesa para disputar el Mundial de Clubes en Brasil le provocó muchos enemigos. Los éxitos en el campo llegaron junto a cambios institucionales importantes, el principal, la compra del club por el norteamericano Malcom Glazer y el control de la sociedad por parte de sus hijos. Se fue Roy Keane al Celtic tras criticar a varios jugadores del núcleo duro del vestuario, se lesionaron Ruud nan Nistelrooy, Scholes, Heinze y Giggs y el United se resintió tanto que incluso Ferguson empezó a ser cuestionado.
En cualquier caso el fútbol del United tenía calidad y volvió a coquetear con el triplete en 2007, con el sueco Henrik Larsson como uno de los delanteros clave. Lo rozó, pero perdió la semifinal de la Champions ante el Milán y la final de Copa contra el Chelsea. Un título más de la Premier empezaba a parecer muy poco. El United de los Fergie babes pedía más. Por supuesto, con continuos cambios de protagonistas desde varios años antes. Se había marchado el mito Beckham, habían llegado Rooney del Everton y después una joven joya lusa aún por pulir llamada Cristiano Ronaldo. Con él tuvo especial mimo Alex Ferguson y empezó a edificar el actual Manchester, una mezcla de talento joven como Ronaldo o Rooney y de veteranos con personalidad como Giggs o Scholes. Giggs dio un paso más en el altar del club con la final de la Champions ante el Chelsea en Moscú. Fue su partido número 759, una marca con la que superó al mito Bobby Charlton. El equipo coronó la temporada con la Champions y la Premier, otra temporada triunfal más de Ferguson. Sir Alex cogió al equipo a mitad de los ochenta en una tremenda crisis y le ha devuelto a lo más alto. Esta temporada, otra Premier y la Champions, a las puertas. Será mañana en Roma. Dos gigantes se enfrentan. No hay más que repasar su historia.