El descenso amenaza aún a nueve clubes de Primera

Nervios, tensión, agobios, transistores. El final de Liga se presenta trepidante en la parte baja de Primera. Casi la mitad de los equipos se jugará la temporada en dos encuentros, los que dictaminen cuál continúa un año más en la máxima categoría y cuál desciende al infierno de la Segunda. Doce días en los que cualquier penalti, cualquier error, cualquier detalle, cobrará una dimensión especial.

Cada uno de los implicados hace sus particulares cuentas. Los que más cerca ven el objetivo son Racing, Valladolid, Espanyol y Betis, que se encuentran a una victoria -en algunos casos hasta menos- de asegurar su continuidad en Primera. Aún así no se pueden confiar, ni siquiera los mejor colocados Racing y Valladolid, pues se enfrentarán en sus respectivos choques a otros de los implicados en la misma lucha que ellos. Pese a ello están en una situación mucho más cómoda que los cinco últimos clasificados.

Getafe y Sporting respiran de momento, pero ven la amenaza muy cerca. Los getafenses entienden que su reválida pasa por ganar este sábado al Numancia en el Coliseum. Eso sí, una derrota ante un rival tan directo sería como un violento empujón hacia el vacío. El Sporting, por su parte, también tendrá dos enfrentamientos a vida o muerte, el segundo de ellos ante un Recre que si llega desahuciado al Molinón en la última jornada puede ser un invitado incluso amable.

Y el descenso.

Pero los que peor colocados afrontan este sprint final son los tres que ocupan puestos de descenso. Ninguno depende de sí mismo, por lo que deben ganar y esperar tropiezos. El tremendo calendario que maniata a Osasuna se puede convertir en un arma de doble filo. Los rojillos visitarán a un Barcelona que reservará al equipo completo con la mente puesta en la final de la Champions, mientras que en la jornada decisiva se jugarán el todo por el todo ante un Madrid muy bizcochón en las últimas semanas.

Todo lo contrario que los navarros, que van con el freno de mano puesto, aparece el Numancia. El equipo de Pacheta se ha instalado en el optimismo después de superar al Recreativo en Los Pajaritos y una victoria en Getafe supondría el trampolín definitivo para soñar con la salvación. El Recreativo se presenta más herido, sobre todo tras la polémica decisión de Pérez Lasa en Soria que le situó como farolillo. Su receta es tan sencilla como compleja: ganar y rezar para que se produzca alguna carambola.

Nueve aficiones vaticinan un desenlace emocionante. Ciudades enteras quedarán paralizadas. Hay 12 duelos directos entre implicados. Dos semanas de infarto, dos jornadas en las que jugárselo todo. Alegría para unos, tristeza para otros.