Pérez Lasa el justiciero

Cuentan los creyentes que la fe es lo último que se pierde, o que mientras haya vida, siempre hay esperanza. Como si se tratara de un milagro, Soria mantiene su fe en la salvación del Numancia cuando menos lo esperaba y de la forma más dolorosa para el rival. Porque el inexistente penalti que señaló Pérez Lasa en el minuto 87 de partido fue una señal de que el destino le tiene un buen sitio guardado a los de Pacheta, por lo menos durante una semana más.

En Huelva ese fatídico error le deja al borde del abismo, quizás también cuando menos lo esperaba. Pero es merecido, duela o no. Entre errores propios y ajenos, el Recre está envuelto en una dinámica de desastre tras desastre sólo cortada por un milagro acaecido en Pamplona. No tiene fútbol, ni maldad, ni contundencia y muy poca calidad... No tiene muchas cosas, lo necesario para aguantar el tipo en una Liga tan poderosa. Haya o no dinero, sea más rico o más pobre. Aunque ya habrá tiempo para los análisis a final de Liga, si el descenso, que está al caer, fuera una realidad.

Lo que es una realidad es que el Numancia sigue muy vivo gracias al gol de Barkero, aunque ese infierno del descenso también siga llamando a sus puertas. Los de Pacheta merecieron un resultado más abultado, sobre todo en la primera parte, donde medio equipo falló de cabeza casi lo infallable. Cada remate se perdía a sólo unos centímetros de los postes de la portería de Riesgo, como si la dichosa pelota no quisiera entrar.

Nervios. La grada de Los Pajaritos comenzó a temerse lo peor. Su equipo era infinitamente superior al Recre, pero el gol no llegaba. El miedo no era tan fuerte porque el equipo de Alcaraz parecía acobardado y timorato, como si no se estuviera jugando la vida en este partido. Sólo unos pocos se acordaron de que en el estadio soriano fue donde tocaron la gloria con las manos hace unas temporadas, donde comenzaron a vivir un sueño.

Ahora, tras muchas alegrías y más sufrimientos, pero siempre con final feliz, parece que ese sueño llega a su fin. En Soria, en cambio, la reacción del equipo en las últimas jornadas ha encendido la llama de la ilusión. No es casualidad que Juan Pablo lleve más de 300 minutos imbatido y que como locales pocos rivales le lean la cartilla. Ni el mísmisimo Barcelona. El viaje a Getafe será una fiesta porque hay una salvación, y un sueño, en juego.

Quizás sea ahora con casi todo perdido cuando el Recre saque de dentro lo que no sacó ayer en Los Pajaritos. De momento, la afición espera con ganas el partido ante el Racing, que llegará al Nuevo Colombino con la salvación casi sellada, para mostrar sus inquietudes, para buscar culpables si creen que los hay.

Puntualmente, gran parte de culpa la tendrá Pérez Lasa, con un error que condena al Recre a uno de los milagros más importantes de la historia. Pero en Huelva son creyentes, y si no se le pide una ayudita a la Virgen del Rocío. En Soria también lo son y su Numancia puede romper todas las estadísticas. Sería una pena morir en la orilla....