Una tortura para la vista

Con el buen tiempo que hacía era obligatorio sacar fuerzas para acercarse a Nueva Condomina (ya fuera desde Murcia, con lo cerquita que está la playa... o cruzarse la península desde Huesca). Los que lo hicieron, merecen un altar o que se les devuelva la entrada. ¡Partido malo, malo! Los de Calderón, a los que el empate les valía, cumplieron el partido. Salieron a lo suyo, y amarraron el 0-0 (el punta Roberto fue sentado antes del descanso). Ni siquiera tiró entre los tres palos del marco de Elía. Eso fue el Huesca.

Ante un rival así, al Murcia se le obligaba a crear, a encerrar a su oponente... y ni una cosa ni otra. Los de Campos sólo ofrecen chispazos, y en esta ocasión sólo cuando Núñez y, sobre todo De Lucas, estaban de por medio. Sin movilidad en el centro, tapando las escasas contras de su oponente, a los grana les tocaba mandar. Pero no sabían. Una ocasión clara de Despotovic, tras una galopada de De Lucas, fue lo único destacable de la primera mitad. Lógicamente, el balón no fue ni a portería.

Poco cambió tras el descanso. Helguera y Sastre se hacían fuertes en la medular buscando a José Végar en la banda (Rubén Castro ni apareció), todo con tal de tener bien lejos la pelota del marco defendido por un Eduardo que estuvo acertado en la ocasión más clara de la tarde. De Lucas le ganó la espalda a la defensa y durante su carrera dudó si picarla, quebrar al meta o romperla... al final, 'tiró al muñeco'. Apenas sin juego, tampoco había definición. El Murcia no ofrecía nada. Sólo los cambios (Capdevila y Gallardo) dieron algo de movilidad pero al Huesca le valía el 0-0. Encima los marcadores de los otros campos eran favorables: perdían Córdoba, Celta, Girona, Las Palmas... y el Alavés no podía con el Éibar.

El trabajo estaba hecho para el Huesca, el viaje merecía la pena. En el Murcia, la tortura continuaba. Los grana, obligados a ganar cerraron la tarde incluso perdiendo tiempo tras la expulsión de Ochoa. Así de triste, así de real. Cinco jornadas por delante para que los aragoneses recojan el premio a una gran primera vuelta y para que los de Nueva Condomina sigan arrastrándose de la forma en la que lo llevan haciendo el último mes y medio.

J. M. Campos

"Nos faltó tranquilidad y criterio ofensivo, pero al final, al menos, empatamos. Era una oportunidad única para dejar atrás el descenso. Estamos donde merecemos. Hemos sido perjudicados por este árbitro otra vez, además sacó demasiadas tarjetas".

A. Calderón

"Partido malo, trabado, sin fútbol ni fluidez. Los rivales nos dejan en zona tranquila. Mantener el marco a cero nos deja satisfechos. Debemos mucho a Roberto y Rubén, pero el partido no estaba para ellos".