Entre la ola y el pañuelo

Nadie pensaba que a estas alturas de mayo Racing y Valladolid estarían aún dudando. Pero ésa es la realidad para ambos equipos y la pesadilla para sus aficiones. El conjunto cántabro suma 39 puntos desde abril y necesita volver a sumar para evitar sorpresas de última hora. Los de Mendilibar ya tienen 42, y desfallecer en estos momentos sería algo improbable, paranormal y digno de estudio. Pero gran parte de la historia del fútbol ya se ha escrito gracias a víctimas más inesperadas y con menos cargos. Cuidado.

Sin embargo, me temo que lo que más hay en juego esta tarde no se mide en puntos, sino en sensaciones, actitudes y prestigio. En el Racing más que nadie, porque otra mala imagen podría suponer un drama. Ante el Almería, El Sardinero animó a Muñiz a exiliarse y aireó periódicos, cuyo mensaje era el mismo que dicta un pañuelo. Otra estocada puede ser definitiva aunque, dada la experiencia, que nadie descarte una nueva ola. La plantilla está convencida de la victoria.

Más de lo mismo. Para los de Mendilibar, el juicio es similar por su decepcionante fin de curso, en el que están aburriendo a su hinchada y desesperando incluso a su presidente. Su último gol lo logró Goitom casi en blanco y negro: frente al Sevilla el pasado 21 de marzo. Eso lo dice todo.

Para intentar lograr la salvación y no alimentar más la ira popular, Muñiz apostará por Christian de central y Moratón de pivote, contará con la llegada milagrosa de Toño, dará paso a Serrano y se decantará por el incordio que produce Pereira antes que por la fortuna que irradia Tchité. Mendilibar se blindará con Luis Prieto y se aferra a Ogbeche arriba dada la pérdida de fe en Goitom. Hace un mes pensábamos que la victoria hoy sería trivial. Lograrla ahora es fundamental.

El equipo de Mendilibar, 699' de sequía

Si hay algo que preocupa al Valladolid y anima al Racing, es que el equipo de Mendilibar encadena ya ocho jornadas sin marcar un solo gol después de haber logrado tres victorias, lo que supone la peor racha en la historia del club pucelano. En cinco de esos encuentros perdió y empató en tres ocasiones. El último tanto del Valladolid fue el pasado 21 de marzo ante el Sevilla y lo logró el criticado Goitom. Debido a este lastre, el conjunto vasllisoletano es el sexto menos goleador de la Liga con 42 tantos. El Racing le sigue en el ránking con tan solo 44 goles.