"Hemos dado un paso decisivo hacia Primera"

¿Cómo vive Ander Herrera el día después del derbi que él decidió con un golazo?

Bien, tranquilo, viendo y escuchando los partidos. Estoy muy satisfecho de mi trabajo en el derbi y sobre todo del triunfo del equipo, era un partido muy importante y lo sacamos adelante.

¿Comparte la idea de Marcelino, que dijo en AS el miércoles que el derbi era el partido más difícil que quedaba?

Sí, era el partido más difícil y el Huesca demostró que es un gran equipo y que no se dejaba ganar, cualquiera que vea el partido puede comprobarlo. Aunque eso no quiere decir que no vayamos a pasar apuros en otros partidos.

¿Salió a celebrarlo? ¿Le costó dormir por los nervios o le venció el cansancio?

Sí, salí por Zaragoza a tomar algo, había que disfrutar. Volviendo de Huesca, en el autobús, sufrí un bajón físico por el esfuerzo realizado y como consecuencia de la descarga de adrenalina... Fue una sensación impresionante lo que vivimos con la afición en el césped y después con los compañeros en el vestuario.

¿Con qué diapositiva se queda de todo lo vivido el sábado en El Alcoraz?

Con la alegría que se ve en toda la gente, en esos zaragocistas que fueron allí y que nos transmitieron mucho apoyo. Sus caras de felicidad no se me van a olvidar.

¿Nos relata su gol?

La clave fue la confianza que me había dado el gol de la semana anterior. Por eso tuve al atrevimiento de irme hacia la portería tras recibir el pase de Gabi entre los pivotes y los centrales. Encaré y vi que Miguel iba retrocediendo hacia su portería. Cuando un portero va hacia atrás, lo más complicado para él es un balón abajo a un lado, así que decidí buscar el disparo con el interior a un lado.

Y lo celebró con la gente, agarrando el escudo y señalando a los aficionados...

Fue un gesto de agradecimiento para todos nuestros aficionados que viajaron a Huesca y que tuvieron que escuchar algunas cosas desagradables durante el partido.

Ander lideró y firmó el triunfo, pero el Zaragoza al completo hizo una gran segunda parte, ¿verdad?

Sí, sobre todo el principio de la segunda parte. Salimos con gran intensidad tras el descanso y tuvimos diez o quince minutos de muy buena combinación al primer toque. Jugamos muy bien

Y ahí Ander, entre líneas, se hace diferencial y eleva el fútbol del equipo...

Tengo la suerte de que el entrenador ha confiado en mí y todo el equipo realizó un gran esfuerzo para jugar así y alcanzar el triunfo.

¿Cómo va su evolución física? ¿Se siente ya preparado para jugar los 90 minutos?

El sábado me encontré mejor que nunca y pensaba que iba a aguantar todo el partido, pero avanzada la segunda parte empecé a notar que se me subía el gemelo derecho. Así que el cambio estuvo bien hecho.

El equipo está enorme, termina cada partido cargado de energías, ¿verdad?

Yo no aguanto al nivel del resto de los compañeros durante los 90 minutos, ya lo decía, pero los demás están físicamente impresionantes, el equipo se siente muy fuerte y por eso acaba tan bien cada partido.

¿Ese ambiente del vestuario que comentaba antes significa que ya ven el ascenso al alcance de la mano?

Sí, el equipo está en un momento de forma fantástico y además tenemos más acierto en acciones concretas que antes. Estamos convencidos de que vamos a conseguir el objetivo y en Huesca dimos un paso importantísimo hacia el ascenso.